eibar - Pasa del equipo estadounidense con el que dio el salto en 2017, el Aevolo, a otro japonés, el Interpro Cycling.
-Bueno, franco-japonés. La sede está en Francia y corremos muchas pruebas del calendario galo. También del español. Las carreras que disputamos supusieron uno de los factores que más me llamó la atención a la hora de aceptar.
¿Tenía más ofertas?
-Sí. Iban llegando cosas desde el extranjero, pero yo tenía claro que solo iba a integrar un proyecto que valiera la pena. A la mayoría de esas propuestas que recibía no les veía una salida a largo plazo. Y para correr así prefería no correr.
¿Qué le llamó la atención de su actual equipo, al margen del calendario?
-Se trata de una escuadra nueva, dentro de lo que cabe, que ha iniciado un proyecto serio y que, como te comentaba, cuenta con un buen calendario de carreras. Esto es algo primordial. Si quiero intentar volver a casa, debo correr bastante y en buenas pruebas. Tengo por delante competiciones suficientes como para progresar o como para, al menos, poder dar lo mejor de mí.
¿Cuáles son esas carreras?
-Tras la Loire Atlantique del pasado fin de semana, el sábado (mañana) estaré en el Gran Premio Indurain, en Estella. El domingo siguiente, el 8 de abril, competiré en Amorebieta. Y después estaré en varias vueltas cortas españolas: Castilla y León, Asturias, Madrid y Aragón. Vengo de un parón competitivo y de inicio está costando volver a entrar en calor, pero espero llegar bien a esas rondas por etapas que arrancan a finales de abril.
Me hablaba antes de “volver a casa”. ¿Es ese su gran objetivo?
-Es la intención que tengo, sí. Analizando los datos de mis entrenamientos, pienso que tengo nivel para terminar en un top 15 o en un top 20 general de estas carreras de categoría Continental o Continental Profesional. Si me salen las cosas como espero, seguro que tengo la posibilidad de que los dos proyectos profesionales vascos (Murias y Fundación Euskadi) se fijen en mí. Para un ciclista, estar en el equipo de casa supone lo máximo.
Y si es corriendo la Itzulia mejor que mejor, ¿no?
-Sería increíble. Los jefes de mi anterior equipo, que era norteamericano, me preguntaban qué carrera me gustaría disputar algún día. Y yo les decía que ni el Tour ni nada por el estilo, que prefería la Itzulia. Se me ponen los pelos de punta solo de pensarlo... Siempre he disfrutado mucho de poder ver a los mejores del mundo compitiendo en las carreras por las que entreno.
En enero firmó su mejor plaza como profesional, segundo en una etapa en Indonesia.
-Era la jornada final y llegamos cuatro escapados. El que a priori era más fuerte se jugaba la general y trabajó mucho, así que para la victoria estaba descartado. Veía muy cerca el triunfo, pero se terminó escapando por milímetros.