Donostia. Alberto Contador ganará hoy su segundo Giro de Italia y probablemente empiece a pensar en el próximo Tour de Francia. Aún no ha confirmado que lo vaya a correr, pero nadie imagina lo contrario. Su director en el Saxo Bank, Bjarne Riis, está "deseando" el duelo en el julio francés de su pupilo con su anterior protegido, Andy Schleck. "Sería un espectáculo fantástico", anticipa el danés, verdugo de Miguel Indurain en el Tour de 1996.
Para entonces, el navarro ya solo hacía una gran vuelta por temporada, aunque aquel año en Banesto le obligaron a disputar la Vuelta a España y así pasó lo que pasó y después ocurrió lo que ocurrió. Las últimas veces que el de Villava encadenó dos rondas de tres semanas no se bajó del podio: en 1991 fue segundo en la Vuelta tras Melcior Mauri y se impuso en el Tour; en 1992 y 1993 ganó el Giro y el Tour y en 1994 acabó tercero en Milán tras Evgeni Berzin y Marco Pantani -maldita pájara en el Valico de Santa Cristina con el ruso ya arrodillado- y volvió a triunfar en París.
Indurain, como hizo el jueves Eddy Merckx, anima al pinteño a afrontar el doble desafío: "Es difícil ganar Giro y Tour en el mismo año, pero no imposible". El último en lograrlo fue Pantani en 1998, aquella edición del caso Festina en la que todos los equipos estatales se volvieron para casa.
Indurain habló ayer en Madrid durante un acto promocional de una firma láctea similar al realizado hace unos días sobre una bicicleta de spinning en Donostia. Si el de Pinto aspira a lucir con éxito el dorsal 1 en el próximo Tour, además de no ser vetado por la organización, deberá "guardar muy bien las fuerzas" hasta el 2 de julio, cuando arranque la ronda.
Para Miguel, el madrileño está completando "una temporada y unos años muy buenos", pero Bjarne va más allá en este Giro: "No sé si Alberto será tan superior a los demás, pero ha dominado de tal forma que puede parecer así. Está muy fuerte, posiblemente más que nunca, en una versión atacante, fantástica".
Ayer se le cuestionó por esto al propio Contador: "No sé si estoy más fuerte que nunca, siempre es difícil sacar conclusiones al respecto. En algunos aspectos, como el nivel de grasa en el cuerpo, sí es cierto que nunca he estado mejor que ahora", se limitó a decir el ciclista, al que "solo una desgracia" le podría privar de ganar hoy el Giro.
Sobre la situación que vive Contador, pendiente de la resolución del TAS sobre su positivo con clembuterol en el Tour 2010, Indurain rompe una lanza a favor del corredor: "El proceso se está alargando demasiado", lo que va "en contra de Alberto y del propio ciclismo. No se puede alargar tanto una decisión como esta".