Zubeldia atraviesa "momentos difíciles"

donostia. Poco a poco -tampoco le quedaba otra- Haimar Zubeldia ha ido encajando el "duro golpe" de saber que, por primera vez desde que debutó en la Vuelta a España en 2000, este año no correrá ninguna grande. La fractura del radio de su brazo derecho sufrida en una caída en el Dauphiné Libéré lo descabalgó del nueve del RadioShack para el Tour de Francia, y la no invitación del equipo norteamericano por parte de Unipublic le deja también sin la Vuelta a España.

El usurbildarra, que ha estado varios días sin realizar declaraciones ni coger el teléfono, comunicó ayer que vive "momentos muy difíciles" tras no poder afrontar su "carrera preferida", que la venía preparando "desde el inicio de temporada". Todo se truncó el pasado 7 de junio, cuando se vio involucrado en una montonera. El diagnóstico de la rotura del radio "fue un duro golpe. Empezamos a contar los días que quedaban hasta el inicio del Tour: 26 en total. Eran insuficientes, pero hablando con el médico del equipo, decidimos que había que intentarlo". Por ello, al día siguiente fue operado en la Clínica Quirón, donde el doctor Goyeneche le fijó el hueso fracturado con tres tornillos. "Los médicos no eran muy optimistas (para poder llegar al Tour), pero yo no lo veía así. Los primeros días estuve haciendo rodillo: tres sesiones al día, y además tratábamos la mano con la ayuda del fisioterapeuta Andoni Ormazabal, del Centro Ekin", dice Haimar.

Sin embargo, el pasado viernes, diez días después de ser intervenido, "salí a rodar a la carretera con una muñequera rígida como protección. Anduve hora y media y vi que mi mano necesitaba estar quieta para recuperar del todo. La decisión estaba tomada: no podía ir al Tour". Su equipo, que "luchará por ganar" la ronda gala con Armstrong, "ha entendido" su decisión.

Ahora, Haimar afronta una situación nueva para él, pues tampoco podrá estar en la Vuelta, "algo que no entiendo". Así, tratará de "recuperar y hacerlo lo mejor posible en las carreras que nos quedan". En similar situación está su compañero Markel Irizar, aunque el oñatiarra no tenía programado el Tour.