No se sabe con precisión quién fue antes, si el huevo o la gallina, pero todo hace suponer que sería esta, que es tan laboriosa y fina. Hoy hablamos del huevo, un producto tan alimenticio y sin duda uno de los más socorridos en la cocina, y cuyo precio se ha disparado un huevo, valga la redundancia. Temerosos del contagio de una gripe aviar que puedan sufrir sus productoras, de otras aves procedentes de su emigración, desde el Norte hasta el Sur, se ha optado por encerrarlas un tiempo cada día, lo cual afecta a su productividad que al parecer es menor, así como el color del huevo, que no es tan amarillo. Este gran protagonista como es el huevo, siempre ha llamado la atención, que si lo añadimos a una ensalada, ésta su precio se dispara un huevo. Es un producto que no dejamos de citar, ¡me importa un huevo!, por ejemplo, pero en esta ocasión sí nos va a importar, porque su precio se ha disparado ¡un huevo!