No ha sido la presente temporada un camino de rosas precisamente para el equipo ordiziarra.

Pero agua pasada no mueve molino y ahora no queda otra que apretar los dientes y tratar de evitar esos dos últimos puestos, en una liga de seis equipos, que llevan inexorablemente al descenso de categorÍa.

Con todo, si impera la lógica, Ordizia seguirá contando con un equipo en la División de Honor de rugby.

¡Ánimo!