Los trabajadores de la Red de Salud Mental Infanto-juvenil de Gipuzkoa (psicóloga/os clínicos, psiquiatras infanto-juveniles, enfermería especializada en Salud Mental, trabajadora/es sociales y terapeutas ocupacionales de Osakidetza) queremos aclarar a la población guipuzcoana que el Hospital de Día de Adolescentes que se inaugurará próximamente en nuestro territorio tendrá un carácter concertado, estando ubicado en un centro privado y cubierto por personal privado en su totalidad. Recordamos que el personal que trabaja en la entidad pública está obligado a obtener una formación especializada clínica en salud mental y cumplir unas condiciones, no requeridas éstas en el sector privado. 

Por poder entender la trascendencia de este hecho, aclaramos que, por ejemplo, los adultos guipuzcoanos que reciben tratamiento en hospitales de día, lo hacen en servicios ubicados en ambulatorios y centros de salud mental, en los que trabaja personal 100% público. Tras más de 30 años realizando proyectos para un hospital de día público, se nos solicita realizar un proyecto conjunto con dicho hospital concertado, para el que no se prevé ninguna creación de plazas desde Osakidetza. Ante la queja de los profesionales, se nos hace creer que se tratará de un servicio “mixto”. Sin embargo, tan sólo se propone la posibilidad de una plaza de enfermería desde Osakidetza, ante lo que se decidió presentar una queja formal por carta certificada a la consejera de Sanidad, de la que no se obtuvo respuesta. 

Queremos igualmente señalar que, en el resto de territorios históricos, tanto en Araba como en Bizkaia, existen hospitales de día infantojuveniles que pertenecen al sector público. 

En último lugar, el hospital de día no tiene que ver con el Centro de Salud Mental Infantojuvenil que se ha abierto en la Bretxa. El de la Bretxa va a ser ocupado por el personal que actualmente trabaja en el Centro de Salud Mental de Ondarreta (conocido como EPI–Equipo de Psiquiatría Infantil), se van a mudar allí, por lo que no es un nuevo servicio, sino un cambio de ubicación del servicio que ya se estaba ofreciendo a la población previamente. 

En conclusión, consideramos que es positivo disponer de un recurso más, pero, al mismo tiempo, es una pena que, tratándose de niños y adolescentes, ese recurso no sea público. Y lo que queremos aclarar es que, aunque a los pacientes no les costará nada, los trabajadores de la pública no podremos acceder a esos puestos de trabajo. Globalmente consideramos que esta situación constituye un agravio comparativo con respecto al mismo recurso en adultos en nuestra provincia, y con respecto a los hospitales de día de salud mental de adolescentes de las otras provincias vascas, que son de Osakidetza, lo que va en contra del parecer de quienes trabajamos en la salud mental pública infanto-juvenil de Gipuzkoa, que consideramos que, para garantizar una atención y una gestión adecuada de este dispositivo, el hospital de día, al ser un recurso de orientación comunitaria, debería ser de gestión completamente pública y con las garantías que ello conlleva. Así lo hacemos constar en esta nota.

Psiquiatra infantil del Centro de Salud Mental de Irun y el colectivo de trabajadores de Salud Mental Infanto-juvenil de la Red de Salud Mental de Gipuzkoa de Osakidetza

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