La primera sensación que uno percibe tras el fichaje de Sorloth por el Villarreal es de absoluta decepción. Pero analizándolo más en profundidad, uno llega a la conclusión de que la pérdida del jugador noruego no ha sido por perspicacia del equipo castellonense, sino más bien por desidia y desinterés de la Real Sociedad. En román paladino: la Real, Olabe e Imanol para entendernos, está jugando la partida a varias bandas y si ha dejado escapar un buen jugador a un coste más que asequible es porque hay mejores opciones en el mercado.
No olvidemos que el equipo txuri-urdin reúne muchos atractivos para que jugadores contrastados deseen aterrizar en Anoeta. A saber: jugar la Champions, pertenecer a un club saneado económicamente que ha disputado la Europa League las cuatro temporadas precedentes, disfrutar del sosiego que insufla Donostia y Gipuzkoa, una afición fiel como pocas, un campo de fútbol precioso con un ambiente incomparable, etc., etc., etc.
