Me preocupa profundamente el proyecto de Bildu, no por lo que dice la prensa "ultra" española o algunos partidos, sino por su postura excluyente, amenazante y chulesca respecto a otras fuerzas políticas y, en concreto, por su aspecto totalizador y totalitario. Bildu se presenta ante el electorado y la oposición pública no como un partido más, sino como el partido, no como una parte del pueblo, sino como el pueblo. "Herria gu gara", "Herriak ez du barkatuko" etc. Bildu se presenta como la representación de todo el pueblo. Ha fagocitado y manipulado las fiestas de los pueblos, la reivindicación del euskera, la lucha popular, la reivindicación de la selección vasca de fútbol, el progreso, la lucha por el medio ambiente, el sentimiento vasco, el bertsolarismo, los presos, etc. El que no apoya lo que ellos dicen y hacen son traidores al pueblo, al euskera y a la libertad de este país.

Ellos pueden hacer pancartas y pintadas insultando a los demás, pero ¡cuidadito con meterse con ellos! La calle es de ellos. No hay más que recordar la campaña electoral y la toma de posesión de muchos ayuntamientos. Me vienen a la mente las palabras de Garitano: "Para hacernos con el poder, somos capaces de pactar hasta con el demonio meridiano". ¿Por qué amenazan a los demás ahora cuando otros pactan con el demonio amarillo? Esto me recuerda a los partidos fascistas y en concreto a los nazis en Alemania. Sólo ellos, la Gran Alemania? y subieron al poder democráticamente. Les deseo lo mejor? pero estoy preocupado y tengo miedo por nuestro pueblo; no puedo remediarlo. Y no soy el único. Con todo, los simpatizantes y militantes de otros partidos ya tienen dónde aprender.

Alejandro Ruiz Erbina