Ibarretxe, genial
Salgo del Euskalduna después de haber escuchado a un Ibarretxe más genial que nunca, en su conferencia Etorkizuna eraikitzen. Hemos visto a un estadista de primer orden mundial, un gran pensador; el mejor que tenemos, sin duda alguna. No obstante, salgo con la presión del estudiante al que le ponen tareas para casa, ya que sin derecho a decidir, no tenemos futuro como pueblo y que se concrete depende, única y exclusivamente, de nosotros mismos.
Hasta ahora sabíamos que el derecho a decidir nos iba a permitir establecer el tipo de relación que nuestro pueblo deseara establecer con España, con Europa y el mundo. Que nos permitiría tener presencia propia en la UE, seguir desarrollando nuestro autogobierno y que incluso nuestra selección nacional pudiera ser reconocida a nivel internacional Yo añado que, sin derecho a decidir nos será imposible, ya no sólo avanzar, sino mantener nuestro autogobierno actual, tal y como nos lo han recordado recientemente a destra e siniestra, tanto José María Aznar como Alfonso Guerra. Cuidado, que esto es lo que PP-PSOE nos tienen preparado para salir de su propia crisis en los próximos años.
Se nos abre un escenario político nuevo y esperanzador, una Euskadi en paz, tenemos que aprovecharlo. Quizá, hasta ahora, no había sido posible "enganchar" en la idea del derecho a decidir a otra parte de nuestra sociedad, tal vez por el grado de bienestar del que ya disfrutamos, pero estoy convencido de que muy pocos están dispuestos a echar un paso atrás. Es aquí donde hay que engancharlos con el resto de la sociedad hasta lograr, por lo menos, ese 70% del que nos hablaba el lehendakari y así, junto con nuestros hermanos catalanes, poner en marcha el potente tren de la razón democrática que sin duda, está muy por encima de cualquier artículo de ninguna Constitución, por muy democrática que presuma ser. Eso sí, para implementar las ideas hacen falta grandes líderes y esto, también, está en nuestras manos.
Como dijo ayer Ibarretxe, nos corresponde a nosotros construir nuestro propio futuro. Mila esker lehendakari, por tu claridad.