Es habitual ver en bares y restaurantes, como en otro tipo de locales, un cartel que dice Se reserva el derecho de admisión, como una forma de evitar a ciertos clientes que les puedan causar problemas. Pero además proliferan otros carteles que avisan de que el baño sólo lo pueden utilizar los clientes, de que no hay servicio de terraza o de que no se divide la cuenta entre varios comensales.
Un restaurante de Burgos
No es raro ver igualmente restricciones en la forma de vestir, sobre todo en locales cercanos a la playa, en los que se suele prohibir entrar sin camiseta, en bañador, descalzo o mojado. Pero el caso que ha llamado la atención en las últimas horas poco tiene que ver con la playa, ya que se trata de un restaurante de Burgos.
La popular cuenta Soy Camarero, que publica en diferentes redes sociales todo tipo de curiosidades y situaciones injustas que se viven en el mundo de la hostelería (la lleva Jesús Soriano, profesional de este sector), ha compartido una foto de lo que se puede ver en la puerta de un local que algún internauta ha identificado como el Casino de Burgos. “Primera vez que veo una prohibición así en un bar, ¿y vosotros?”, ha escrito Soriano en el post.
Prenda prohibida
En la imagen se ve a la figura de un cocinero que sostiene un folio verde introducido dentro de una carpeta de plástico transparente y en el que aparece el menú de fin de semana, que por 26 euros permite elegir entre cuatro primeros (ha sorprendido la llamada paella del señorito), cuatro segundos (más llama la atención todavía el cachopo burgalés), postre o café y vino tinto o agua, con un suplemento si se come en la terraza.
Hasta ahí todo más o menos normal, aunque el precio a muchos les parece discutible. Pero lo que llama la atención es lo que aparece debajo del menú: otro folio, en este caso blanco, en la que se lee Prohibido entrar en pantalones cortos y se ve una señal de prohibido con esa prenda dibujada.
Restricción inapropiada
Una restricción que muchísimos tuiteros no entienden, y más considerando que en Burgos en verano hace mucho calor y que un pantalón corto no tiene por qué ser una prenda inapropiada para comer un menú. “Es una de las normas que tienen los socios”, explica uno de los usuarios de X en los comentarios.
Con más de 70.000 visualizaciones y cerca de 300 respuestas en apenas un día, hay quienes creen que puede tratarse de un “delito de discriminación” al tener en cuenta que el pantalón corto es una prenda que mayoritariamente usan los hombres; y otros que sugieren quitarse los pantalones y entrar en ropa interior para así cumplir con la norma.