A tan solo dos pasos de competir en la Liga ACB se encuentra el Guuk Gipuzkoa Basket. Si sale victorioso de la final four que tendrá lugar este fin de semana en Burgos, el equipo donostiarra militará de nuevo en la máxima categoría del basket estatal tras una temporada en la que no ha destacado pero en la que superar la eliminatoria contra el Coruña (el resultado fue de 1-3 favorable para los guipuzcoanos), tras clasificarse para el play-off en el puesto octavo de la LEB Oro, le ha armado de moral hasta el punto de pensar que es una gran oportunidad que van a tratar de aprovechar.

Y eso que no pueden contar con su mejor jugador. Un Justin Jaworski que dejó el GBC tras disputarse la eliminatoria de cuartos del play-off debido a que su boda se celebrará este mismo sábado, en una incomprensible muestra de su falta de previsión.

En cualquier caso, en el GBC, Lolo Encinas y sus pupilos confían, y mucho, en lograr la gesta del ascenso. “Es una oportunidad muy bonita y un regalo de la temporada. Creo que hemos hecho un buen trabajo durante la semana y estamos preparados”, reconoce Aitor Zubizarreta, uno de los integrantes de la plantilla.

El primer paso lo afrontarán mañana contra el San Pablo Burgos, a partir de las 20.30 horas, precisamente un equipo anfitrión que contará con casi todo el público a su favor en un Coliseum Burgos que tiene una capacidad para 12.000 espectadores. Pero todo el público no porque el GBC contará con unos 500 incondicionales que también creen en la hazaña. Unidos, como piensa el propio Lolo, será más fácil conseguir este complicado objetivo.

El segundo paso llegará el sábado, a partir también de las 20.30 horas, si el GBC es capaz de superar al equipo local. En este caso se mediría al ganador de la otra semifinal, en la que se enfrentan el Palencia y el Valladolid en un derbi castellano.

La empresa es complicada, pero no imposible. Así lo piensan los jugadores de la escuadra guipuzcoana. “El equipo lo está haciendo bien, no estamos nerviosos sino motivados. Vais a ver un equipo con hambre y muy bueno en defensa, pero lo más importante es que somos un equipo y una familia”, admite Adam Sollazzo. Su compañero, Zubi, también lo deja claro: “Es momento de dar un paso adelante toda la plantilla y creemos en nosotros, en los compañeros y en el staff”. Pues eso, es la oportunidad.