Donostia. Los Indiana Pacers han logrado igualar la final de la Conferencia Este de la NBA (2-2) tras apuntarse el triunfo en el cuarto partido frente a Miami Heat (99-92), logrando imponer su superioridad bajo los aros y consiguiendo desquiciar a LeBron James, que acabó expulsado por faltas personales.
Una más que discutible falta en ataque cometida por LeBron James (24 puntos) en un bloqueo dejó a los Heat sin su mayor estrella a falta de 56 segundos, cuando el marcador reflejaba un 96-92 favorable a Indiana. Era la primera eliminación de toda la temporada para el MVP de la fase regular y la segunda de su carrera en los play-off.
LeBron abandonó la cancha del Bankers Life Fieldhouse con gesto de incredulidad y su equipo ya no pudo anotar, mientras los Pacers sentenciaban el partido desde el tiro libre. Fue una victoria merecida del conjunto local, que endosó a Miami su primera derrota a domicilio en esta postemporada.