DONOSTIA - Un joven de 22 años que había intentado presuntamente robar en una tienda de Donostia ha sido detenido por la Ertzaintza, que lo localizó tras seguir el reguero de manchas de sangre que dejó desde el comercio hasta la pensión en la que se alojaba, ha informado el Departamento vasco de Seguridad.

El intento de robo se perpetró sobre las 22.50 horas de la noche del domingo en un comercio de la Parte Vieja donostiarra, adonde acudió a Ertzaintza tras recibir el aviso de un testigo.

Los agentes comprobaron que la cristalera del local estaba rota y que había un reguero de sangre en el suelo.

También observaron que el presunto ladrón no había logrado acceder al interior del establecimiento porque se lo impedía una cámara frigorífica.

Los agentes siguieron la dirección de los restos de sangre, que les condujeron hasta una pensión, donde, mientras los ertzainas explicaban al propietario lo ocurrido, un hombre salió de la ducha con un profundo corte en una mano.

El sospechoso no ofreció una explicación convincente sobre el origen del corte y cayó en contradicciones, por lo que fue identificado y detenido como presunto autor del intento de robo.

El arrestado, de 22 años de edad y con antecedentes delictivos, fue trasladado a dependencias de la Ertzaintza para realizar las correspondientes diligencias, tras lo que será puesto a disposición judicial en las próximas horas.