Las instituciones vascas elaboran un plan de contingencia para atender a menores que se encuentran actualmente en Ceuta después de tres días tumultuosos con un repunte migratorio nunca visto en la zona que provocó la entrada de más de 8.000 personas en menos de 48 horas, entre ellos 1.500 menores.

Según fuentes españolas, 5.600 adultos han sido devueltos a Marruecos pero la situación más preocupante se registra actualmente con los más pequeños. Hay familias que están buscando a sus hijos, y otras que han depositado sus esperanzas en ellos, mostrando su disposición a que sigan el proyecto migratorio.

Desde que tuvieron conocimiento de "esta situación tan complicada", las instituciones vascas convocaron el mismo lunes una reunión de urgencia. "Estendemos que hay que dar una respuesta de país, y estamos elaborando un plan de contingencia", ha avanzado este jueves en Donostia la diputada de Políticas Sociales de Gipuzkoa, Maite Peña.

Ayer miércoles tuvo lugar el segundo encuentro. El Consejo territorial de Derechos Sociales se reunió por la tarde para plantear a las comunidades autónomas la necesidad de acoger a 200 menores que ya estaban siendo atendidos antes de la llegada masiva de esta semana. El acuerdo de reparto ha asignado por el momento ocho de esos jóvenes a Euskadi.

El objetivo es liberar los recursos para dar cabida a los menores de edad que han llegado en los últimos días, que responden a un perfil diferente al habitual, según explica la viceconsejera de Políticas Sociales, Lide Amilibia. "Muchos de ellos son muy pequeños. Incluso hay quienes no sabían a qué venían, y quienes se han mostrado arrepentidos. Se sienten solos y en muchos casos sus familias les están reclamando al otro lado".

Lo que se ha pedido a las comunidades autónomas es proceder a un reparto solidario con esos 200 menores que estaban previamente en los recursos de Ceuta. A última hora del miércoles llegó la propuesta. Las comunidades tienen de plazo esta misma mañana para responder. El Gobierno Vasco ya avanzó ayer miércoles que estaba de acuerdo con el criterio establecido, una vez acordada la hoja de ruta a seguir con las diputaciones, que son las competentes en esta materia.

"Indudablemente, vamos a dar un paso adelante y vamos a acoger. Pero también hemos pedido reformas estructurales que garanticen que estos menores puedan desarrollar un proyecto vital en Euskadi. Necesitan poder trabajar y necesitan tener unos papeles en orden", ha señalado esta mañana la diputada Maite Peña.

La viceconsejera de Políticas Sociales se ha manifestado en términos similares. "Lo que pedimos es un planteamiento serio porque lo que estamos haciendo son parcheos. A una emergencia hay que responder. ¿Cómo no lo vas a hacer viendo las imágenes de Ceuta? El problema es que estas crisis se van a ir repitiendo y el Estado español tiene que hacer un planteamiento serio, de ahí que hayamos reclamado la Conferencia Sectorial de Migraciones".