- El Tribunal Supremo ha establecido que en el delito de pornografía infantil cada menor es una víctima y deben entenderse cometidos tantos delitos como menores resulten atacados, de manera que rechaza que pueda imponerse una sola condena por un delito continuado. Esta posibilidad solo admite en supuestos en los que la reiteración de conductas se proyecta sobre un mismo sujeto pasivo.