- Envejecer en casa o, si esto no fuera viable, en un lugar lo más parecido posible al hogar. Esta es la opción preferente de las personas mayores de Euskadi, donde se va a abrir un proceso de reflexión sobre el modelo de residencias con el fin de fomentar un envejecimiento “satisfactorio y pleno”.

La consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, señaló ayer que este nuevo proceso de reflexión participativo en torno al modelo residencial para personas mayores pretende detectar vías de mejora y necesidades de adaptación a la sociedad y la realidad de los mayores. “Esta reflexión nos servirá de guía para revisar o no, en función del resultado de la misma, nuestro modelo actual. Y también el decreto que regula los centros residenciales de la Comunidad Autónoma del País Vasco”, indicó la consejera. El Gobierno Vasco espera recibir antes de fin de año las recomendaciones surgidas de este proceso de reflexión para valorarlas y poder tomar decisiones, si es que es lo que se recomienda. “Debemos ser capaces de visionar un futuro deseado acorde y conectado con las necesidades y deseos de la ciudadanía, en el marco de los recursos y contextos legales existentes”, destacó la consejera.

En un acto celebrado en Gasteiz en el que se anunció la puesta en marcha del proceso de reflexión, Artolazabal señaló que “el perfil de la persona mayor está cambiando; es más asertiva y comunicativa en sus necesidades, tiene más formación y ha desarrollado habilidades de consumidores exigentes”. “Su opción predilecta -añadió- es vivir en casa y cuando no sea posible, en un alojamiento con características de hogar, donde se le considere como persona única y se le trate a partir de sus capacidades, se facilite la participación familiar, disponga de profesionales cualificados, cuenten con un diseño amigable con la edad, se dé soporte a su autonomía e independencia y cuente con actividades abiertas a la comunidad. Satisfacer estas demandas se puede llevar a cabo adoptando modelos más humanistas que consideren a la persona mayor en su rol de asesor y consultor y como agente activo en la gestión de sus cuidados”.

El proceso participativo de reflexión incluirá a todos los agentes implicados en el modelo actual de residencias y de atención gerontológica y contará con un panel de expertos que se reunirá varias veces a lo largo de los próximos meses.