- Casi un año después de que el derrumbe del vertedero de Zaldibar segara la vida de Joaquín Beltrán, a quien todavía se busca entre los escombros, y Alberto Sololuze, cuyo cuerpo fue recuperado en agosto, la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, consideró que “debe ser sellado y cerrado definitivamente”.

“Una vez finalizado todo ese proceso -de búsqueda de Beltrán-, entendemos que el vertedero de Zaldibar ha de ser sellado. Los daños al medio ambiente han sido suficientes como para que en este momento nos planteemos la remediación de la situación y el cierre definitivo del vertedero”, señaló Tapia.

La consejera informó de que el pasado jueves se retomaron los trabajos de localización del trabajador desaparecido y explicó que, en este momento, la búsqueda se centra en un área denominada B4s, trabajos que finalizarán en el plazo de diez días.

A partir de entonces, y en caso de no encontrar a Beltrán, los trabajos se desplazarán a las áreas B1b y B1c. Sin embargo, la responsable de Medio Ambiente recordó que existe “una cantidad de vertidos muy grande” y, por lo tanto, riesgo de derrumbe, por lo que hace que primero se debe “ir quitando los residuos de la parte superior y llevar a los depósitos creados, garantizando, al mismo tiempo, la estabilidad para que entren los equipos de búsqueda del departamento de Seguridad”.