"Hay que dar el 'do de pecho' en el emprendimiento"

Entre los grandes desafíos de su proyecto se encuentran los sociales, alineados con los 17 Objetivos Mundiales de Desarrollo Sostenible y con la agenda 2030, además de la mejora en formación, investigación y comunicación a la sociedad. Por otro lado, también se incluye el impulso del euskera y de la cultura vasca.

¿Qué le impulsa a presentarse a rectora: carrera profesional, servicio a la Universidad, mejorar cosas concretas ...?

-Todo un poco, el servicio a la universidad, a la sociedad. En el último año me he encontrado con el impulso vital fuerte y suficiente para tomar la decisión; al hilo del inicio de la pandemia en marzo me encontré con ganas, porque sentí que era el momento para impulsar más que nunca la Universidad pública.

El jueves 4 de noviembre finalizó el plazo de presentación de candidaturas a rectora y veo que la de usted es la única. ¿Es una buena o mala noticia?

-Depende de cómo se mire. Por un lado, se podía pensar que es negativo ya que no hay debate para contrarrestar dos o más proyectos para la Universidad vasca. A mí, como candidata, me resultaría más fácil hablar de un proyecto contraponiéndolo con otro alternativo; siempre es más fácil. Pero el hecho de que no surjan nuevas candidaturas también puede dar pie a pensar que es un voto de confianza, entre otras razones, porque no es ningún secreto que soy una persona que ha estado institucionalmente implicada en otros equipos rectorales y tengo el apoyo de la persona que está todavía hoy al frente de la Universidad pública vasca.

Presenta una plancha igualitaria en cuanto a género. ¿También en el reparto de los campus y en el de áreas: ciencias, humanidades, sociales, tecnológicas?

-La plancha está equilibrada. En los campus se ha mantenido la proporcionalidad sobre la presencia en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa y también en áreas del conocimiento; es importante que las mujeres estén representadas en las grandes ramas del saber y hay que ser muy sensibles sobre cómo aportar el conocimiento en la UPV/EHU.

Me quieren hablar de salud y sacan imágenes de edificios de hospitales; hablan de transporte y nos presentan estaciones y trenes, aeropuertos. Hablamos de Universidad y, ¿de qué tenemos que ocuparnos: de edificios, de máquinas? o, ¿tal vez debiéramos hablar más de alumnos, investigadores e interacción con la ciudadanía?-Diría que las tres. Como imagen física están las aulas, los laboratorios, las bibliotecas, los foros de debate, los despachos ..., allí donde se produce el conocimiento eso también es universidad, así como el trabajo colaborativo con el sector empresarial, social, esto también es universidad, porque todos somos universidad.

Desde el punto de vista estructural, tenemos una universidad distribuida en tres campus alejados, "muy descentralizada", ¿qué carencias o necesidades observan y qué desean mejorar/corregir?

-Esta es una universidad única que tiene su identidad propia muy marcada, evidentemente con una visión descentralizada hasta el punto de máxima eficacia que nos permite el modelo de campus con tres vicerrectores. Además de mejorar la colaboración, lo que nos queda en este aspecto es la búsqueda del equilibrio de identidad de la Universidad en sus tres campus.

Desde el punto de vista del profesorado, ¿qué propuestas trae su equipo para fomentar con fuerza una docencia que inevitablemente camina hacia la transformación digital y la internacionalización?

-Insisto en el concepto de evolución, porque la UPV/EHU evoluciona desde su nacimiento en su forma y modo de generar conocimiento, transferirlo y relacionarlo con otros centros de formación. En este sentido, la generación digital es en lo que estamos ahora; un revolución rápida y prioritaria, pero con el objetivo de lograr carreras laborales efectivas que sean individualmente atractivas, motivadoras y que estén aliadas con los objetivos globales de la universidad. Tenemos que valorar más la investigación y necesitamos que la gente sea capaz de generar conocimientos, pero también precisamos de personas que sepan difundirlos y hacer un trabajo colaborativo con la sociedad. No podemos olvidar que la función básica de la universidad es formar excelentemente a sus estudiantes y que no todo el profesorado debe hacer de todo; alcanzado un mínimo imprescindible en investigación y formación, creo que luego deben de ser capaces de redefinir carreras profesionales, incentivadoras y motivadoras. Repito, sin olvidar que tras la formación está la investigación y la gestión.

¿Qué propuestas presenta su equipo para atraer talento docente e investigador? ¿Solo el atractivo económico sería suficiente? ¿Cómo fomentar el atractivo que aporta un ambiente investigador y de inquietud intelectual?

-Es una buena pregunta, porque en las decisiones humanas y laborales también forma parte de nuestras vidas el incentivo económico, una realidad que no se puede negar. Pero entre el profesora y los investigadores universitarios/as no todo tiene que ver con el factor económico; juegan también como bazas importantes el factor del reconocimiento, el trabajar en lo que nos gusta y poder llevar a cabo investigaciones en condiciones adecuadas; así como el tener acceso a una docencia innovadora y gratificante, además de contar con grupos de trabajo colaborativos con los que se pueda realizar una buena política universitaria y desarrollar labores de divulgación y transferencia.

Desde el punto de vista del alumnado, ¿qué propuestas presentan para incentivar su participación?

-Esta es la gran incógnita; el cómo hacer que el alumnado participe en cantidad y calidad. Es difícil, pero hay que llegar a ellos. Las herramientas para estudiantes jóvenes que utilizábamos en otras generaciones ya no sirven; utilizan unos canales de información tanto internos como externos distintos. Queremos configurar un grupo con un vicerrectorado al frente para llegar a los jóvenes. La labor de pedagogía es clave para llegar a ellos.

¿Cómo?

-Realizando reuniones y actos específicos que les resulten atractivos. Los estudiantes de 2020 tienen muchas cosas en común con los que estudiábamos hace unas décadas, pero son muy distintos; no podemos usar las mismas formas de comunicarnos con ellos que antiguamente.

¿Qué propuestas concretas hacen para favorecer su empleabilidad al terminar sus estudios?

-En este camino tenemos mucho recorrido realizado y vamos a seguir fomentándolo. Por un lado, están los centros de empleo, donde hay mucho asesoramiento para favorecerles en sus inicios laborales. Sin embargo, como universidad, algo que nos toca muy directamente y que ya se hace, es que durante su formación tengan la oportunidad de realizar prácticas en empresas; en este sentido, la formación dual está siendo muy exitosa y la seguiremos impulsando.

Abogan por impulsar el inglés, ¿cómo, aumentado la oferta para aprenderlo o fomentándola como lengua vehicular?

-La Universidad lo que tiene que hacer es favorecer el aprendizaje en otras lenguas. Desde este punto de vista, está claro que el inglés como lengua franca para los trabajos en la investigación resulta una pieza clave. Es una realidad ineludible que está ahí. Queremos impulsar sobre todo que entre los posgrados haya muchos más internacionales, donde el inglés, si no en su totalidad sí en un porcentaje significativo, sea una de las lenguas vehiculares; igualmente en los grados. Ya tenemos un grado completo en inglés, y sí, queremos seguir aumentando la oferta en inglés o, por lo menos, que haya una parte destacada de docencia en inglés.

Ustedes proponen incrementar su colaboración con otras universidades europeas. ¿Entre el COVID y el adiós británico, no cree que esto será más difícil y proyectos tipo Erasmus se tambalearán?

-Los reformaremos; es cierto que no hay sustitución para la presencia física. Es una realidad. Sin embargo, no se trata de que cambiemos y realicemos todas las estancias virtuales, aunque sí que hay un hueco para que tengamos colaboraciones, para que hayan muchas colaboraciones vías virtuales. Debemos conseguir compaginar lo presencial con lo virtual; y que cuando se normalice la situación nos deje a volver a hacer hincapié en la parte presencial, que es fundamental. Las estancias lo ideal sería que fueran presenciales, porque se trata de que el alumnado que llegue al País Vasco se impregne no solo del conocimiento, sino también de la parte cultural, de la lingüística, de la idiosincracia de nuestro pueblo. Esto hay que mantenerlo. Y para el alumnado vasco que sale fuera, pues lo mismo. Si en estos momentos, por la situación de crisis económica, no lo podemos hacer de forma presencial, pues tendremos la oportunidad de lo virtual.

La he oído explicar que quieren responder mejor a las demandas y retos de la sociedad. ¿No es bastante desconocida la Universidad en nuestro entorno? ¿Cómo plantean comunicar mejor a la sociedad el trabajo que se desarrolla en la Universidad?

-Hay que matizar esto. No creo que sea una gran desconocida para el gran público. Porque como institución, según el Sociobarómetro de 2019, es una de las más valoradas y también de las más reconocidas. Tal vez lo que no está suficientemente explicado es que, además de que la Universidad forma de graduados y graduadas a futuros doctores/as, también somos una fuente de transmisión del conocimiento a la sociedad. Con el tema del COVID-19, se ha oído en los medios de comunicación y en foros de debate importante a muchos de nuestros profesionales. Gente experta en la pandemia, desde distintos ámbitos, sanitarios, salud pública, de recogida de datos, de especialistas en tecnología clave. Eso ha estado y está ahí, es un valor muy reconocido con la comunidad científica, pero también por la sociedad.

¿Les falta visibilidad?

Creo que todavía no hemos logrado poner en valor social todo el trabajo de nuestra gente. Por eso mi empeño es contar a la sociedad todo lo que se hace desde la Universidad pública vasca bajo el paraguas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas. Es un formato en el que nos sentimos cómodos y en el que trabajamos para conseguir una Euskadi más solidaria, más en consonancia con los grandes retos, como el cambio climático. Hay que decir a la sociedad los retos que llevamos a cabo

Una universidad en Euskadi que utiliza el castellano, quiere vehicular en inglés. ¿Qué presencia plantean para el euskera?

-El euskera tiene una altísima frecuencia en la UPV/EHU; no creo que exista un colectivo de personas -alrededor de 60.000- que pasan por nuestra universidad: estudiantes, profesorado, gente formándose, gente de paso... donde la presencia y la comunicación del euskera sea tan amplia; en los términos de formación de grado está también en plena normalidad, al igual que el castellano. No existe otra universidad donde haya una formación en euskera como la nuestra. Desde la raíz de nuestro idioma y con las ramas abiertas al mundo; no queremos compartimentos estancos, sino que realmente el euskera y la cultura sean transversales. En el ámbito de la investigación cada vez hay más y con importantes logros de reconocimiento.

Del 9 al 23 de noviembre. Cerrada la lista el pasado 4, el día 9 comienza la campaña y al mismo tiempo el plazo para votar todos los que componen la comunidad universitaria vasca. Dada la situación de crisis sanitaria provocada por la pandemia que no cesa, se podrá votar de forma on line en estos días o el día 26 presencialmente. Dado que solo hay una lista electoral para nuevo equipo rectoral, la expectativa sestá en saber el refrendo con el que contarán. Por eso animan a votar a todos los miembros de la universidad.

Dispuesta a hablar con todos. La candidata muestra su intención de estar a disposición de todas las personas que requieran aclaraciones y a escuchar, por supuesto, las propuestas de las personas interesadas en mejorar el funcionamiento de la Universidad pública Vasca. https://www.ehu.eus/es/web/idazkaritza-nagusia/errektore-hauteskundeak-2020

"Este equipo rectoral va a poner en valor y a trabajar por dar mayor visibilidad social al trabajo de todos sus profesionales; nos lo debemos y nos falta hacerlo"

"No existe otra Universidad donde haya una formación en euskera como la nuestra; en la UPV/EHU estamos desde la raíz de nuestro idioma con todas las ramas abiertas"

"Tenemos un largo camino ya realizado, pero hemos de continuar incentivando los programas de formación dual y la colaboración con las empresas"

"Nuestra Universidad, según el barómetro de 2019, es de las instituciones más reconocidas y valoradas por la ciudadanía vasca, pero hay que acercarse más a ella"