- Denunciar al agresor es fundamental para detectar a tiempo un posible caso de violencia de género en el ámbito de la pareja. Esa es la principal conclusión que se observa del estudio realizado por el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género que señala que solo en el 15,4% de las sentencias constaba de denuncia previa.

De las sentencias dictadas en 2018 por el Tribunal del Jurado y las Audiencias Provinciales en casos de asesinato y homicidio en el ámbito de la pareja, únicamente el 15,4% contaban con una denuncia previa. Así lo dio ayer a conocer el Observatorio del Consejo General del Poder Judicial a través de un informe centrado en las 46 sentencias recogidas hace dos años y que alerta, una vez más, de la especialidad de un delito en el que la víctima, a diferencia de lo que sí ocurre en otros tipos penales, nunca denuncia a su agresor.

De las 46 sentencias analizadas, 39 se refieren a homicidios y asesinatos de violencia de género, de los que 37 -es decir, el 94,9%- la víctima era una mujer. Solo en los dos casos restantes -el 5,1%- el agresor no era un hombre, lo que demuestra, una vez más, la vulnerabilidad a la que se enfrentan las mujeres. De hecho, de las 39 personas enjuiciadas y condenadas, 36 eran hombres.

De estas condenas, la mayoría -31-, fueron calificadas como asesinato, lo que implica que la muerte se realizó con alevosía o ensañamiento. La circunstancia agravante más frecuente fue la de parentesco, en el 88,6%, seguida de la de alevosía, en un 77,14%. En tercer lugar se sitúa la de género, con un 31,42%. Se trata del primer estudio que recoge esta circunstancia.

Además, en seis de los casos los hijos menores de la pareja fueron testigos directos de los hechos, lo que supone el 13% de las sentencias. Un dato muy a tener en cuenta, ya que como indicó el Observatorio, ello tiene consecuencias devastadoras para la salud psicológica de los menores y quintuplica el riesgo de que desarrollen problemas mentales en el futuro.

En lo que se refiere a las formas de cometer el crimen, el análisis forense reveló hasta seis maneras diferentes, siendo el arma blanca, el 30,5%, la más empleada.

El informe recoge numerosos puntos adicionales como las circunstancias atenuantes y los años de pena para los agresores. Sin embargo, que en el 84,6% de estas sentencias no constase ni una denuncia previa es el dato más alarmante para el Observatorio. Por ello, quiso hacer un llamamiento a todas las administraciones públicas para tratar de otorgar una mayor y mejor información a las víctimas sobre sus derechos y los recursos existentes en la lucha contra la violencia machista, así como para mejorar la detección de situaciones de riesgo en mujeres que no quieren denunciar pero acuden a centros sociales a pedir ayuda.