- A fin de construir un territorio libre de violencia machista y alcanzar la autonomía económica y el empleo de calidad para las mujeres, la Diputación de Gipuzkoa incorporará la perspectiva de género en las políticas aprobadas para hacer frente al COVID-19.

El diputado general, Markel Olano, y la directora foral de Igualdad, Miren Elgarresta, comparecieron ayer en Donostia, donde presentaron el III Plan foral para la Igualdad de Mujeres y Hombres en Gipuzkoa 2020-2023, una iniciativa que constará de 26 objetivos estratégicos y 122 acciones, y que permitirá al territorio “seguir avanzando en cuatro ámbitos prioritarios para la consecución de la igualdad: el buen gobierno, el empoderamiento de las mujeres, la transformación económica y social y la lucha contra la violencia machista”.

Según expuso Olano, el índice de igualdad de género, publicado por primera vez este año, sitúa a Gipuzkoa al nivel de los países más avanzados de Europa, ya que con 72,5 puntos sobre cien, se encuentra solo detrás de Finlandia (73,4), Francia (74,6), Dinamarca (77,5) y Suecia (83,5). A fin de que no se produzcan “retrocesos” en la materia, el Ejecutivo foral se compromete a garantizar la “igualdad de oportunidades” entre mujeres y hombres, especialmente en el ámbito económico. “La apuesta por la igualdad forma parte de la realidad socio-económica de Gipuzkoa. Debemos reforzar este valor como parte del desarrollo humano sostenible del que se ha dotado nuestro territorio, más si cabe a la hora de salir de la crisis actual”, expuso Olano. Por ello, y teniendo en cuenta el contexto de crisis económica que ha generado la pandemia, el diputado general avanzó que llevará a cabo diversas acciones “para contribuir a la autonomía económica de las mujeres y el empleo de calidad, así como para incrementar nuestro compromiso con la igualdad en los cuidados, la conciliación corresponsable como palanca de transformación social”.

En este sentido, adelantó que se buscará la expansión de la red Erantzunkide Sarea, conformada actualmente por 35 empresas y 6.592 trabajadores comprometidos con la conciliación corresponsable; así como el desarrollo de HerriLAB Beasain, un programa mediante el cual el municipio se ha convertido en un laboratorio de medidas y de políticas a favor de esta cuestión.

Asimismo, se prevén nuevas medidas de apoyo para el fortalecimiento de empresas creadas por mujeres, itinerarios de inserción sociolaboral que se enmarcarán en el proyecto Elkar Ekin Lanean y una experiencia piloto para el empoderamiento de las mujeres científicas.

A fin de mantener un “compromiso colectivo, activo y cívico” en contra de la violencia machista, se impulsará el II Plan Aurre, reforzando los mecanismos de atención a las víctimas.

Por su parte, Elgarresta explicó que para la elaboración de este plan se ha contado con una participación “amplia y diversa”, desde las diversas direcciones de la Diputación, hasta municipios y agentes sociales y, especialmente, asociaciones de mujeres y colectivos del movimiento feminista, que han realizado 358 aportaciones al documento.

Con respecto a los cuatro ejes de actuación, en lo que hace referencia al buen gobierno, se ampliará la formación del personal de la institución foral en materia de igualdad, y se renovará el programa Berdinbidean para el impulso de las políticas de igualdad en los municipios y mancomunidades con menos de 10.000 habitantes.

En el capítulo del empoderamiento “social y colectivo” de las mujeres Elgarresta propuso medidas para “reconocer la contribución” de las mujeres y del feminismo en el desarrollo del “modelo Gipuzkoa”. Además, se abrirá un proceso de reflexión para la elaboración de un modelo propio para las casas de mujeres de Gipuzkoa y se activarán medidas para la promoción de la mujer en ámbitos de representación de la sociedad y de la política.

En la búsqueda de la transformación social y económica, la directora de igualdad defendió la necesidad de “cuestionar” los valores sobre los que se asientan las desigualdades de género, así como de avanzar en el reconocimiento de la igualdad. Finalmente, Elgarresta se reafirmó en la necesidad de fomentar la investigación sobre la violencia machista, mantener las acciones de sensibilización, prevención y formación e impulsar la mejora continua y la coordinación entre las instituciones.

El índice de igualdad de Gipuzkoa se sitúa entre los más altos de Europa, solo por detrás de Finlandia, Francia, Dinamarca y Suecia