- La Guardia Municipal de Donostia disolvió el jueves por la noche sendos botellones en la zona de Ondarreta y Miramon, ambos con un amplio grupo de personas congregadas. En total sancionaron a 33 personas por beber en la calle y a otras 16 les pusieron multas por no llevar mascarilla.

“Lamentablemente tenemos que seguir insistiendo con este tema; deberíamos estar todos bastante más concienciados, pero parece que a algunos les cuesta bastante”, afirmó ayer el concejal de Seguridad Ciudadana de Donostia, Martin Ibabe. El edil explicó que “había un número importante de personas en las dos quedadas”, por eso quiso volver a insistir en el llamamiento a que se eviten este tipo de situaciones. “Seguiremos actuando de la misma manera y solicitamos que se reconduzcan estas actuaciones que suponen un riesgo sanitario absolutamente innecesario”, añadió. “Deberíamos ser todos un poco más conscientes y más cívicos”, señaló.

Además, fuentes municipales confirmaron que también la noche del jueves al viernes la Policía Local de Donostia sancionó a un bar por seguir abierto más allá del horario permitido.

Por otro lado, finalizada la temporada de playas, los datos de la Guardia Municipal y Ertzaintza constatan que este verano atípico ha habido un descenso en el número de denuncias registradas en los arenales donostiarras (del 15 de junio al 15 de septiembre). En concreto, se han contabilizado 212, mientras que el año pasado fueron 240 (un 11,7% menos).

El mayor descenso se ha producido en la playa de La Concha (103 denuncias, un 31% menos), aunque hay que tener en cuenta que la playa estaba cerrada durante cuatro horas en los momentos de pleamar, por lo que la afluencia de personas ha sido bastante menor. En la Zurriola prácticamente se ha mantenido el número de denuncias (84) y en Ondarreta ha aumentado: de once el año pasado a 25 en 2020.

Los datos proporcionados por la Guardia Municipal y Ertzaintza constatan que los delitos más denunciados son los hurtos (158 denuncias, 47 menos), seguidos de los hurtos de bicicletas (26, un total de 19 más que el verano pasado).

Aunque las denuncias hayan bajado, este verano se ha duplicado el número de personas detenidas, hasta un total de 31: quince en La Concha, trece en la Zurriola y tres en Ondarreta. Además, diez personas han sido investigadas por la comisión de algún delito (una más que en 2019).

“En un verano tan atípico como el que hemos vivido, los agentes de la Guardia Municipal y la Ertzaintza han hecho un gran trabajo a la hora de controlar los aforos y el funcionamiento de las playas para que las y los donostiarras, así como las personas que nos han visitado, hayan podido disfrutar de forma segura”, declaró Ibabe, que también valoró la labor de los bautizados como hondartzainak, de los socorristas y demás personal que ha trabajado en las playas.