- Cuando aún resuenan en el territorio los ecos de la mediática detención de una surfista que supuestamente estaba saltándose la cuarentena en la playa donostiarra de La Zurriola tras ser diagnosticada como positivo en COVID-19, ayer se vivió un episodio similar en Eibar, si bien esta vez la persona afectada no presentó ningún tipo de resistencia y facilitó a los agentes su detención.
Quienes a mediodía de ayer se encontraban en las inmediaciones de la parada de Euskotren en Ardanza, en pleno centro de la localidad armera, se sorprendieron al encontrar un dispositivo especial formado por cuatro agentes de la Policía local que portaban Equipos de Protección Individual (EPI). Los agentes conversaban con un hombre de mediana edad, al parecer un vendedor ambulante de origen extranjero, que posteriormente fue detenido y trasladado al Hospital de Debabarrena.
Según explicaron fuentes de ese cuerpo policial a este periódico, el hombre se encontraba con síntomas compatibles con los de un resfriado y confesó a los agentes que había dado positivo, por lo que se procedió a su detención, hecho para el cual el hombre afectado no presentó ningún tipo de resistencia.
Inmediatamente, esta persona fue trasladada al Hospital de Debabarrena, donde se le practicó la PCR pertinente.
