- Ya lo advirtió el lunes la consejera de Salud, Nekane Murga: la pandemia está arrojando las últimas semanas unas cifras que dibujan picos de sierra, con notorias subidas y bajadas. Ayer los nuevos contagios volvieron a sobrepasar la barrera del medio millar (576), pero más allá del grueso del dato, quizás lo más preocupante de las cifras dadas a conocer ayer es que los casos entre personas mayores de 70 años prácticamente se han doblado en 24 horas, pasando de los 48 del miércoles a los 82 de ayer, lo que pone en evidencia que la edad de las personas afectadas por esta segunda ola va en aumento. Y esto tiene una repercusión directa con el número de hospitalizaciones, que ayer rozaron las 200 (196) en el conjunto de la CAV.

Así se desgrana de los datos ofrecidos por el Departamento vasco de Salud sobre la situación epidemiológica del virus, que sumó otro pico de contagios, al alcanzar los 576 nuevos positivos, diagnosticados gracias a las 7.023 pruebas PCR que se realizaron en la jornada anterior.

Un día más, la mayoría de los contagios se produjeron en Bizkaia (372 casos, 56 más que el día anterior), seguido de Araba (117 casos, 31 más) y Gipuzkoa (73 positivos, ocho menos que el miércoles).

En Gipuzkoa, la mala noticia del día llegó de la mano de las residencias, donde se registraron tres nuevos casos, que se suman a los dos ya conocidos. La buena, que estas tres personas son asintomáticas.

Según informó la Diputación en un comunicado, los nuevos positivos se han registrado en el centro San Ignacio de Donostia, el mismo donde se han registrado otros tres casos (uno de ellos acabó con el fallecimiento de una anciana). De esta forma, en esta segunda ola de la pandemia, la red foral de residencias cuenta actualmente con cinco contagiados, de un total de 65 centros y 5.425 usuarios.

Los nuevos contagios han sido diagnosticados gracias a las pruebas de cribado que se vienen realizando en la red de centros de titularidad foral. Esta última ha sido la tercera vez que los usuarios del centro San Ignacio, ubicado en el mismo complejo residencial que Hermano Garate, se realizaban las pruebas, arrojando como resultado tres positivos, que se corresponden a tres personas asintomáticas que residen en la misma planta y sector en donde se detectaron los anteriores casos.

A fin de tratar de controlar este brote, estos usuarios han sido "aislados" por el momento en habitaciones individuales, dentro del propio complejo residencial, mientras que las dos personas diagnosticadas la pasada semana continúan ingresadas en la tercera planta del Hospital de Eibar, que es el recurso que se ha habilitado para la atención de casos de COVID-19 derivados de las residencias.

La Diputación remarcó que el departamento de Políticas Sociales que dirige Maite Peña está en "constante comunicación" con el Departamento de Salud del Gobierno Vasco, mantiene activo el Sistema de Vigilancia y Alerta para hacer frente al COVID-19 en los servicios y recursos sociales de Gipuzkoa, y así "vigilar a tiempo real" el avance del virus y reforzar los recursos y servicios sociales.

Mientras tanto, Azpeitia va recuperando poco a poco la normalidad, si bien una buena parte de la población permanece confinada por su relación con el brote registrado en su parte vieja.

Ayer, ocho nuevos positivos engrosaron la lista de contagios, que ya alcanza los 111 en menos de una semana. Sin embargo, consciente de que el virus todavía está en el municipio, la alcaldesa, Nagore Alkorta, hizo un llamamiento a la responsabilidad y recordó que el confinamiento es obligatorio hasta que las pruebas PCR den negativo. "Cada positivo significa poner a prueba tus contactos directos, y la posibilidad de que haya más positivos", recordó.

En este momento, además de controlar el brote, la principal preocupación del Consistorio es que los contagios no afecten a la residencia San Martin, donde tanto las visitas como las salidas quedaron suspendidas a consecuencia de esta excepcional situación.

No es el único municipio que se va recuperando de la situación vivida días atrás. Andoain es uno de ellos y es que el Ayuntamiento informó ayer de que el polideportivo Allurralde volverá a abrir hoy sus puertas, después de que el martes fuera cerrado tras dar positivo un trabajador.

El Consistorio explicó que en estos días se ha procedido a la desinfección y limpieza de todas las instalaciones", y que tras contactar con las autoridades competentes, el polideportivo está preparado para ser reabierto. No obstante, hizo un llamamiento a la ciudadanía para que "actúe con prudencia y responsabilidad, y que extremen más que nunca las medidas higiénicas, de protección y de distanciamiento".

Por otro lado, Bizkaia continúa siendo el territorio que más preocupa, especialmente porque suma 104 contagios en su red de residencias, que también tiene a 63 trabajadores infectados.

Además, Bilbao continúa registrando casi la mitad de los casos (177), y es que siguen activos los brotes de las discotecas Fever y Back&Stage. De igual forma, también continúa sumando positivos el brote ligado con el batzoki de Erandio (+8) y en Getxo ayer hubo un pico de 46 contagios.

Las tres personas contagiadas en la residencia San Ignacio de Donostia son asintomáticas y están aisladas