- Medio millar de personas con problemas de adicción, en algunos casos aflorados o agravados por el confinamiento por el coronavirus, serán atendidas en Euskadi por el programa Erdu del Gobierno Vasco que ofrecerá asistencia tanto presencial como telemática.

El lehendakari, Iñigo Urkullu, no pudo asistir como tenía previsto a la presentación de esta iniciativa que tuvo lugar ayer en Donostia, en la residencia Haurtxoak, recurso en el que residen mujeres de especial vulnerabilidad con sus hijos. El acto sí contó con la presencia del diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, y de numerosos representantes del Gobierno Vasco, entre ellos la viceconsejera de Políticas Sociales, Lide Amilibia, el director de Salud Pública y Adicciones, Juanjo Aurrekoetxea, y la directora de Servicios Sociales, Marian Olabarrieta.

El objetivo del programa Erdu es dar una respuesta a las situaciones de “especial delicadeza” que han emergido por el confinamiento, que ha provocado un aumento del consumo de drogas y también que personas con adicciones hayan tomado conciencia de su dependencia durante el estado de alarma por la pandemia.

Por este motivo, el departamento de Empleo y Políticas Sociales ha decidido reforzar, dentro del Fondo Inor atzean utzi gabe, esta iniciativa que contará con un presupuesto de 375.000 euros.

Para responder a esta problemática, quince profesionales de cuatro entidades -Agipad, Etorkintza, Gizakia y Jaiki- se encargarán de desplegar en los tres territorios este programa, que contempla dos recursos asistenciales.

Por una parte, estarán las unidades móviles especializadas de atención que se desplazarán a los recursos que así lo precisen para facilitar una atención en adicciones complementaria a la que estos ofrecen, en coordinación con los sistemas de salud y protección social.

Estas unidades operaban únicamente en el área de Bilbao y ahora se amplían a los tres territorios.

Además, el programa Erdu también incluye una atención telemática en adicciones, dirigida a personas a las que la propia situación de confinamiento ha puesto en situación de riesgo ante el aumento de consumos o que han tomado conciencia de su dependencia y desconocen los recursos disponibles.

La viceconsejera de Políticas Sociales leyó un mensaje de Iñigo Urkullu, quien agradeció la labor que realizan estas asociaciones que atienden a personas con adicciones y que han sido capaces de “dar una respuesta a las transformaciones de la realidad”.

Olano calificó de “buena práctica” la puesta en marcha de este programa y resaltó “la importancia de la cooperación interinstitucional en el marco de una residencia para mujeres vulnerables impulsada por Diputación, Ayuntamiento de San Sebastián y Gobierno Vasco”.

“La situación extrema generada por el coronavirus ha demostrado que el Sistema vasco de Servicios Sociales funciona y ha sabido superar esta prueba de máximo estrés”.