- Gipuzkoa suspende las visitas en las residencias de personas mayores, donde se impulsará el contacto mediante videoconferencia, y cerrará los centros de día y los de dispacacidad e inclusión social. Estas son algunas de las decisiones que se contemplan en el último paquete de medidas extraordinario aprobado por la Diputación para hacer frente a la crisis sanitaria creada por el coronavirus.

Según explicó en un comunicado, la institución foral está identificando espacios para ponerlos al servicio del Gobierno Vasco "por si fuera necesario".

Con respecto a las iniciativas aprobadas, el departamento de Políticas Sociales intensificará las medidas de prevención y actuación para proteger a las personas mayores y en situación de dependencia ante el COVID-19. El departamento suspenderá las valoraciones de dependencia, discapacidad y atención temprana, salvo en casos de urgencia, que serán analizados y estudiados individualmente.

Asimismo, se paralizan de forma provisional las estancias temporales para poder disponer en los centros residenciales de habitaciones libres en caso de necesitar espacio para aislar a personas contagiadas. "El objetivo final de todas las medidas adoptadas es prevenir y, en su caso, frenar la transmisión del virus entre las personas más vulnerables", señaló la institución foral.

Además, la Diputación reforzará los servicios considerados críticos, tales como el colectivo de ciudadores de las residencias o los bomberos. Con respecto a estos últimos, se han tomado una serie de medidas "excepcionales". Todos los bomberos deberán permanecer sujetos a su parque y a su turno, con el objetivo de evitar contagios, no podrán celebrar reuniones y las prácticas que conlleven contacto físico se evitarán. Asimismo, se les reclama que actúen "con la máxima prudencia" en su vida privada.

De igual forma en el servicio de atención de emergencias Bai Esan no estará permitido que nadie del exterior entre en la sala en la que se gestiona el servicio, donde habrá un solo operador de día y otro de noche.

La institución foral también ha tomado medidas de prevención y contención extraordinarias en los servicios de Lurraldebus. De esta forma, no se podrá acceder a los autobuses por las puertas delanteras, los primeros asientos deberán quedar libres y solo se autorizará el pago con la tarjeta Mugi, no en metálico.

Con respecto a los trabajadores de los peajes, se priorizará el pago mediante dispositivos de telepeaje y tarjetas bancarias. Además, se reducirá al mínimo el personal de cabina, con un único operario que permita el pago con monedas.

Finalmente, en lo que hace referencia al resto de trabajadores de la institución foral, la jornada laboral quedará reducida a cinco horas -de 7.00 horas a 15.00 horas- aplicándose la flexibilidad que cada trabajador requiera para conciliar su vida personal y laboral.