donostia - Paky, una empleada de 61 años del centro gerontológico Alai Etxe de Donostia, “dialoga” con el diputado general, Markel Olano, sobre lo que es o no “insostenible” en un nuevo cartel que ha editado ELA para exigir a la institución foral que solucione el conflicto laboral en este sector.

El nuevo cartel, que une en una misma foto la mitad del rostro de Olano y de Paky, fue presentado ayer en una concentración que un centenar de trabajadoras que secundan las huelgas convocadas por ELA ofreció ante la Diputación en la capital donostiarra.

Con esta iniciativa, las empleadas, que ayer cumplieron 214 días acumulados de huelga desde septiembre de 2018, pretenden llamar la atención sobre el carácter “feminista” de su “lucha”, con motivo de la cercanía del Día de la Mujer.

En el cartel figura una frase entrecomillada de Olano en la que se indica que “aceptar las peticiones de las trabajadoras de las residencias es insostenible y dejaría al sistema ahogado”, a lo que Paky responde que “lo insostenible” es que “más de un tercio de la plantilla” no alcance un salario “mileurista” a la vez que el diputado general “cobrará en 2020 un 8 % más que el año anterior, hasta los 86.078,72 euros al año”.

También es “insostenible”, prosigue la operaria, “sufrir una brecha salarial del 30%; levantar, asear, vestir y cambiar pañales en 15 minutos o que por las noches solo haya dos auxiliares para atender a 140 residentes”.

“Lo que es insostenible es privatizar los cuidados para que unos pocos se enriquezcan con beneficios cada vez más altos, a costa de las condiciones laborales miserables de las trabajadoras”, continúa, en el cartel, la empleada de la residencia donostiarra que gestiona la empresa Biharko en Intxaurrondo.

Por su lado, Ana Merchán y Bego Gainza, que actuaron de portavoces en la presentación, acusaron a Olano de “mentir” cuando afirma que “apuesta por las políticas de igualdad en la economía, los cuidados y la lucha contra la violencia machista” pues, a su juicio, dicha afirmación solo “forma parte de los discursos institucionales” de “la maquinaria de marketing y propaganda” del Gobierno foral.

Insistieron en que la Diputación, junto a las patronales, “es directamente responsable” de “la precariedad de las condiciones laborales” de las trabajadoras y “la falta de calidad del servicio y la atención” a los ancianos. - Efe