En una palabra: redonda. Así resultó ayer la jornada en la que Arrasate transforma su centro urbano en un hervidero de gente al calor de la fiesta. La coincidencia en domingo de la feria de santamasak elevó notablemente la temperatura festiva. La afluencia de público se dejó sentir tanto en las calles abarrotadas como en las colas para hacerse con un talo relleno de txistorra, panceta, queso o chocolate para los paladares más golosos. "Estamos que no paramos. No hace más que llegar gente", apreciaban desde el puesto de talogiles de Ataun, enclavado bajo la pérgola de Biteri.

Era mediodía y el hambre comenzaba a manifestarse en los estómagos. Así que, mientras muchos saciaban el apetito, en muchos casos aderezando el tentempié con un buen trago de sidra, otros tantos recorrían uno por uno los escaparates feriales. Más de un centenar de cabezas de vacuno, caballar, caprino, ovino y hasta perros pastor se exhibieron en la plaza José María Arizmendiarrieta. Una selección de los mejores animales criados en los caseríos del entorno, que, sin lugar a dudas, volvieron a ser el reclamo de los más pequeños, al igual que las aves expuestas en Garibai.

Este año una de las novedades del muestrario animal fueron las ovejas de la raza francesa Berrichon du Cher, aunque la mayor parte de las miradas las acaparó el majestuoso caballo Shire, originario del norte de Inglaterra, perteneciente al caserío Sologaizto del barrio arrasatearra de Bedoña. La ganadería comarcal competía en atracción con el cerdo Xanti Smith, que lejos de alterarse ante el revuelo que por momentos se formaba a su alrededor, reposaba plácidamente en el remolque del txerrimobil.

En la plaza Jokin Zaitegi y en Biteri Etorbidea, por su parte, las creaciones hechas a mano cobraban especial protagonismo. Había un poco de todo, como en botica. Zapatos, cerámica, talla en madera, encaje de bolillos y una variada representación de artículos de cuero y bisutería dieron sobradas muestras de la creatividad e ingenio de los autores y autoras del amplio abanico de trabajos artesanales que ayer pudieron contemplarse en Arrasate.

En la cercana plaza Biteri, los más de 60 expositores de alimentación entremezclaban sus aromas con el del inigualable olor y sabor de los talos que se servían en los alrededores.

más gente paseando La meteorología se comportó y contribuyó a hacer de santamasak una feria masiva. "Estamos trabajando, pero no más que otros años", explicaba Rakel Perez de Arenaza, una habitual en el palmarés de los concursos de frutas y verduras, que se hizo con el primer premio al mejor puesto local. Esta baserritarra del caserío Askasibar, en el barrio de Mea-tzerreka, precisaba que la coincidencia en festivo no había disparado las ventas. "Hay mucha gente paseando; mirando", señalaba desde su expositor, en el que ofrecía pan, chorizo y verduras de temporada como berzas, puerros y romanescu, entre otros tesoros vegetales. Sobre estos últimos comentaba que el temporal de lluvia ha dificultado su recolecta en la huerta.

La soraluzetarra Ezozi Etxeberria, una habitual de la cita del 22 de diciembre desde hace "unos doce años", era de la misma opinión que su compañera de palmarés. "Es domingo y la gente está más a pasear que a comprar. Hemos vendido bien pan de caserío y fruta, pero menos cantidad de verduras", añadía esta baserritarra que en dos días ha hecho doblete. El sábado ganó el certamen de verduras del día de Santo Tomás, en Donostia, y ayer se embolsó el primer premio del de Arrasate en la misma categoría.

Cuando el reloj marcaba las 13.45 horas, y con los sones de la txalaparta como punto de partida, la tradicional Txerri dantza congregó a numerosas personas en la Herriko plaza. Dantzaris, músicos, albokaris, trikitilaris, txistularis y cantores llevaron la voz cantante en la representación de este popular baile que ha cumplido 28 años de andadura.

Santamasak regaló una estampa a rebosar de gente. Con la esencia pura del caserío y los trajes de baserritarra dominando el paisaje en una jornada, a medio camino entre feria y fiesta, que se hace querer por niños, jóvenes y mayores. Con numerosos ingredientes para hacer de esta cita un día grande en Arrasate.

Barazkiak. Lehenengo saria Ezozi Etxeberriak (Soraluze) jaso zuen (250 euro eta trofeoa).

Bigarren postuan Jose Lonbide (Aramaio) geratu zen (200 euro).

Fruta. Jose Antonio Elosegik (Gabiria) eraman zuen lehenengo saria (250 euro eta trofeoa). Bigarrena Mariasun Iturbe arrasatearrari eman zioten (200 euro).

Herriko saltokirik onena. Lehenengo saria Rakel Perez de Arenazarentzat (250 euro eta trofeoa). Bigarrena: Ane Gorosabel (200 euro), eta hirugarrena: Maria Arana (150 euro).

Aipamen berezia (ogia). Itziar Egidazu arrasatearrak irabazi zuen (150 euro).

Aipamen berezia (barazki ekologikoak). Ibai Ormaetxea (Aramaio; 150 euro).