donostia - Las obras que la Diputación de Gipuzkoa llevará a cabo en el túnel de San Lorenzo supondrán la prohibición del tráfico pesado por la A-15 desde mayo hasta septiembre. Cuatro meses en los que el transporte de mercancías tendrá que optar por la N-I y que coinciden en el tiempo con las obras que Navarra realizará en los túneles de Belate y por las que recomendará como alternativa precisamente la autovía de Leitzaran para todos los vehículos, salvo los pesados.

La diputada de Infraestructuras Viarias de Gipuzkoa, Aintzane Oiarbide, y el vicepresidente económico de Navarra, Manu Ayerdi, se reunieron el miércoles para coordinar los desvíos de tráfico resultantes de adecuar los túneles de Belate (N-121-A) y San Lorenzo (A-15) a los parámetros de seguridad exigidos por Europa. La UE dio de tiempo hasta 2019 para que todos los túneles de más de 500 metros de longitud -San Lorenzo tiene 758 y Belate 2.960 metros- y que estén situados en la red transeuropea de carreteras, como es el caso, adopten las medidas oportunas para lograr un nivel de protección uniforme, constante y elevado para toda la ciudadanía europea. Ambos túneles se encuentran ubicados en carreteras de la red principal de Navarra y Gipuzkoa y que, además, son utilizadas por el transporte de mercancías internacional en su camino desde la Península hacia Europa.

Se da la circunstancia de que las obras van a coincidir en el tiempo, porque en los túneles de San Lorenzo (término municipal de Berastegi) comenzarán en la segunda quincena de mayo y concluirán en septiembre; mientras que en los de Belate los trabajos se prolongarán entre junio y noviembre.

La N-121-A, además, se cerrará al tráfico totalmente, por lo que las alternativas serán, por un lado, la vieja N-121-A, ahora NA-1210 que atraviesa el puerto de Belate y, por otro, la A-15, que a pesar de las obras que se ejecutarán en el túnel sentido Iruñea, mantendrá abierta la carretera al tráfico con un baipás en el túnel de la otra dirección en la que podrán circular todo tipo de vehículos, salvo el transporte pesado de mercancía por motivos de seguridad. Para estos, la única opción será la N-I, que desde enero es una carretera de pago para los camiones de más de 3,5 toneladas.

Por la N-121-1 circulan diariamente 10.018 vehículos diarios, de los que 2.749 son pesados. Para estos, la alternativa quizá más lógica sea la NA-1210 que, además, antes de comenzar las obras de los túneles, será sometida a una importante labor de mejora reforzando el firme y mejorando los elementos de seguridad vial y señalización.

Pero no todos optarán por esta carretera de un único carril en cada sentido, y preferirán otra alternativa que, a falta de la A-15, será la N-I, que soporta una media diaria de 12.000 vehículos pesados y que, precisamente por ese motivo de ser una vía principal utilizada por el tráfico internacional -con el desgaste que eso supone- es de pago -mediante el sistema AT que permite el pago telemático sin parar-.

Para el resto de vehículos, incluidos los autobuses, la A-15 se convertirá en la mejor alternativa. - A.U.S.