- A falta de que EH Bildu responda a la oferta de Azpiazu el lunes, la negociación parece tomar un color poco halagüeño. La coalición abertzale ha sido fría con la oferta del consejero aunque, en caso de rechazarla, se enfrenta al reto de justificar las razones cuando esa oferta incluye medidas que ha pactado en Nafarroa y es económicamente superior a las enmiendas que ha arañado en el Estado español con Pedro Sánchez (25 millones del fondo para víctimas del amianto y algunas infraestructuras que rondan cada una el millón de euros). Todo ello, a pesar de que el PSOE sí necesita apoyos por no tener mayoría absoluta y gestiona un presupuesto 35 veces mayor.

El plazo para registrar enmiendas a la totalidad finaliza el viernes de la próxima semana y se votarán el martes 14 de diciembre en un pleno extraordinario. EH Bildu ha visto cómo el Gobierno Vasco cede con algunas cuestiones que parecían líneas rojas y se abre a debatir sobre la fiscalidad en el Órgano de Coordinación Tributaria, donde va a plantear incentivos y penalizaciones fiscales para los precios del alquiler. Maddalen Iriarte le reprocha que no constituya una ponencia fiscal. Azpiazu dio respuesta a esta petición planteando una reflexión en coherencia con el mandato del Parlamento Vasco, dejando claro que las competencias son de los territorios forales y la reflexión es suya.