- Baleares puede estar en las puertas de sentar un precedente clave para todo el Estado. El Govern liderado por la socialista Francina Armengol está pendiente de que el Tribunal Superior de las islas decida sobre las opciones de mantener las restricciones contra el coronavirus sin estado de alarma. El tribunal, con tres días para decidir, ya tiene sobre la mesa un pronunciamiento contrario del fiscal jefe de Baleares Bartomeu Barceló, quien explicaba ayer a Efe que mantener el toque de queda entre las 23.00 y las 6.00 horas solo se puede hacer con el amparo del estado de alarma. Es más, añade que sería un sinsentido que el Gobierno español hubiera decretado la alarma para dar cobertura a esta medida si resulta que las comunidades pueden mantener ahora la restricción una vez decaído ese paraguas jurídico. También cree que el Ejecutivo autonómico no tiene competencias para limitar las reuniones en domicilios privados y en concreto, con una limitación de seis personas en dos núcleos de convivencia. Sí ve posible la Fiscalía que se mantengan las limitaciones de encuentros sociales en bares y restaurantes, así como los horarios y los aforos en comercios porque es competencia autonómica, algo que ya se conocía antes del estado de alarma. También permite que el Govern limite la afluencia en los lugares de culto al 50%. La sala de lo contencioso del superior de justicia decidirá antes del viernes, y a Baleares le quedaría la opción de recurrir en casación al Supremo y que decida en cinco días hábiles.
