- Hoy se conmemora el 45 aniversario de la proclamación de Juan Carlos como rey en una situación insólita, con el protagonista fuera de España y con un goteo de investigaciones y noticias en torno a sus presuntos negocios y cuentas opacos que empañan su legado. Las Cortes franquistas fueron testigo, dos días después de la muerte de Franco de la ceremonia de juramento del nuevo jefe del Estado con la que se abrió la puerta a la Transición.
Los elogios y el agradecimiento a su labor fue patente en las conmemoraciones a lo largo de los años. En 2015, al cumplirse el 40 aniversario, fue Felipe VI quien rindió homenaje a su padre por haber protagonizado un proyecto de concordia nacional.
Desde entonces se han ido sucediendo acontecimientos y noticias en torno al rey emérito que han desembocado en la apertura de tres investigaciones por parte de la Fiscalía del Tribunal Supremo. La primera, sobre una cuenta en Suiza atribuida a él y el posible cobro de comisiones por el tren de alta velocidad a La Meca, y la segunda, relacionada con el uso de tarjetas opacas a otro nombre.
A ellas se ha sumado una última vía de investigación por un presunto blanqueo de capitales tras recibir un informe del organismo público encargado de supervisar y prevenir este tipo de delitos.
Las indagaciones prosiguen con el rey Juan Carlos ausente de España desde el pasado 3 de agosto tras decidir fijar temporalmente su residencia en otro país ante la repercusión publica de “ciertos acontecimientos pasados” de su vida privada y, según manifestó su entorno, “para facilitar al rey Felipe VI la tranquilidad y el sosiego que requiere el ejercicio de sus funciones”.
