- El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, aseguró ayer que es una “señal positiva” que Rusia quiera dialogar con Estados Unidos y con la Alianza Atlántica en plena tensión militar en la frontera con Ucrania, pero advirtió de que “el riesgo de conflicto es real”.

“Dialogaremos con Rusia de buena fe, pero también debemos estar preparados para la posibilidad de que la diplomacia falle”, dijo Stoltenberg al término de la reunión que mantuvieron por videoconferencia los ministros de Exteriores de la OTAN para coordinarse ante los encuentros con Moscú de la semana próxima. Estados Unidos se reunirá con Rusia el próximo lunes en Ginebra y dos días después la OTAN hará lo propio con representantes del Kremlin. “Espero que sea el inicio de un proceso en el que podamos comprometernos” con el Kremlin “en una serie de asuntos”, dijo el líder de la Alianza Atlántica.

Entre ellos mencionó “la posibilidad de hablar del control de armas y la transparencia de las actividades militares”, asuntos que “ayudarán a aumentar nuestra seguridad y serán buenos para la paz y la estabilidad en Europa”. No obstante, el secretario general de la OTAN señaló que el despliegue militar de Rusia continúa con decenas de miles de tropas y armamento pesado, así como una retórica amenazante”, y advirtió de que Moscú “ya ha usado antes la fuerza contra países como Georgia o Ucrania”. “Todo esto envía un mensaje de que hay un riego para un nuevo conflicto armado en Europa”, sostuvo.

Stoltenberg reiteró el aviso de Estados Unidos y de la Unión Europea al Kremlin de que aprobarían sanciones económicas en caso de una nueva invasión a Ucrania, como ya hizo en 2014 cuando se anexionó la península de Crimea.

Aseguró también que. en caso de una invasión, la OTAN “hará lo necesario para proteger y defender” a los aliados y, aunque evitó especular cuántas tropas podría enviar la Alianza Atlántica a Ucrania en caso de un ataque ruso, recordó que la organización militar triplicó su presencia en el este, con 40.000 soldados de reacción rápida. “Apoyamos a Ucrania al respaldar sus capacidades militares”, dijo el noruego, porque aunque Kiev “no es un aliado de la OTAN, sí es un socio de mucho valor, amenazado por Rusia”.

Sobre la petición de la Unión Europea de que se tengan en cuenta sus intereses en las conversaciones con Rusia sobre un nuevo marco de seguridad en Europa, Stoltenberg dijo que “Estados Unidos fue claro en que no habrá decisión” sobre ese asunto “sin europeos en la mesa”. “Eso es lo que hace a la OTAN única e indispensable, que une a la UE y a Norteamérica”, señaló Stoltenberg, cuyo mandato termina este año. Su sucesor será elegido en la cumbre que tendrá lugar los próximos días 29 y 30 de junio en Madrid. -

Debate. Stoltenberg conversó ayer además con la primera ministra de Suecia, Magdalena Andersson, y con el presidente de Finlandia, Sauli Niinstö, y aseguró que “la OTAN respeta el derecho de cualquier país a elegir su propio camino”, en referencia a la posible incorporación de ambos países a la organización, entre la que también mencionó las de Ucrania y Georgia, a las que Rusia se opone. La ampliación de la Alianza con Estocolmo y Helsinki es un tema a debate político en esos países, que observan con preocupación las maniobras de Rusia en los últimos años para hacerse, a través de medios militares, con los recursos naturales del Ártico, una zona estratégica también para Europa y EEUU.