donostia- ¿Cuál era el objetivo del encuentro con el lehendakari Iñigo Urkullu? ¿Cómo ha transcurrido la reunión?

-El objetivo de la visita al lehendakari Urkullu era, en primer lugar, agradecerle sus gestos de solidaridad con lo venezolanos en el País Vasco, que se han venido incrementando exponencialmente. Estamos muy agradecidos porque él ha logrado ayudar a los venezolanos de menos recursos, pero también ha estado exigiendo al Gobierno central la posibilidad de agilizar los trámites de permiso de trabajo a los venezolanos y eso también se lo pedimos nosotros, que hiciera esa gestión, porque la verdad, los venezolanos no buscan subsidios, lo que buscan es trabajo.

¿Y a nivel político?

-Hablamos de la necesidad que tenemos los venezolanos de tener solidaridad de todos los países del mundo, fundamentalmente de Europa y especialmente de España, de que haya mayor presión sobre la dictadura para que se hagan elecciones presidenciales imparciales con la reforma del consejo nacional electoral y del tribunal supremo de justicia, que permita que esas elecciones sean creíbles y libres. Él nos prometió que ese era uno de los requerimientos que desde el País Vasco iban a hacer.

¿En qué punto se encuentran las relaciones entre Venezuela y España después de la visita de Guaidó a Madrid y la controversia por denominar a este como líder de la oposición?

-A nosotros, oficialmente, incluso en presencia de Guaidó, la canciller nos ratificó que la política española no había cambiado ni iba a cambiar un ápice distinto a lo que ahora había acontecido: no reconocer el gobierno usurpador y reconocer a Juan Guaidó. Y hoy nos lo ratificaba también, que esa es la postura del Gobierno Vasco. Esa es la solidaridad que hemos tenido en todo el mundo. Esa es nuestra labor, que el régimen ceda, porque ha quedado demostrado que quien no quiere elecciones es el régimen usurpador. Las últimas conversaciones que tuvimos, auspiciadas por Noruega, se hizo una propuesta: que se retiraran tanto Maduro como Guaidó, que se designaba un consejo de estado que propusiera la reforma del consejo nacional electoral, que la aprobaríamos en la asamblea nacional y seguidamente y también alguna reforma del tribunal supremo de justicia, sobre todo la sala constitucional que se ha encargado de derogar todas las leyes que aprobamos en la asamblea nacional. Esa propuesta, que era muy viable, llevó a que ellos se pararan de la mesa y ya no volvieran más.

¿Es posible todavía el diálogo?

-Si ellos responden a esa última propuesta, pero se levantaron y no respondieron, demostrando que no tienen ningún interés en elecciones presidenciales. Ellos andan en una especie de engañifa, diciendo que lo que estaba planteado son elecciones parlamentarias, que deberían celebrarse en diciembre de este año, y nosotros decimos que estamos dispuestos a ir a esas elecciones siempre y cuando haya elecciones presidenciales. No tiene ningún sentido ir a las parlamentarias sin las presidenciales. Participar en esas elecciones con ese señor en la presidencia, así nosotros accediéramos a ir a unas elecciones parlamentarias, la gente no nos acompañaría, porque el venezolano está muy politizado y tiene muy claro cómo están las cosas, y participar en una elección fraudulenta no tiene ningún sentido y no lo vamos a hacer.

Entonces no participarán en las elecciones de diciembre si antes no hay presidenciales.

-Si antes no hay presidenciales, no tiene ningún sentido, eso sería una burla más para la gente.

La situación en las calles en Venezuela ha cambiado. Hace un año, las manifestaciones eran continuas y masivas, se puso en marcha la 'Operación Libertad'... ahora, en cambio, el movimiento se ha desinflado. ¿Qué ha ocurrido?

-Todos los días en Venezuela hay protestas, no se han convocado marchas masivas, aunque se va a convocar una en marzo, que va a ser una manifestación muy importante. Pero todos los días hay protestas en Venezuela por toda la cantidad de problemas que tenemos, problemas de todo tipo, problemas de falta de agua, de falta de luz, de gas doméstico... lo que pasa es que a los efectos de las gráficas para el exterior se piensa que si no hay una gran marcha, no hubiera protestas, pero las hay a diario.

Guaidó hizo recientemente una gira para recabar apoyos de la comunidad internacional. Ya de vuelta en Venezuela, ¿cuál es su estrategia para mantener la presión?

-Seguir en la calle, no hay alternativa y seguir la presión internacional. Lo que siempre pedimos en Europa son las sanciones internacionales a los testaferros de los corruptos de Venezuela. Hay mucho dinero en Europa y en España producto de la corrupción en Venezuela. Ya hemos visto que estos días las fiscalías se han estado moviendo y han embargado algunas cuentas de algunos testaferros del régimen, incluyendo a uno muy importante que es este señor que presidía Globovisión, Raúl Gorrín. No digamos a los capitostes del régimen, que se cuidan de tener cuentas a su nombre, pero tienen muchos testaferros, gente a la que hay que preguntar de dónde vienen esas fortunas repentinas que llegan a los bancos.

¿Qué le parece la polémica por el encuentro entre José Luis Ábalos y Delcy Rodríguez?

-Yo le tengo mucha estima a Ábalos, porque es un hombre que hasta ahora siempre nos ha demostrado solidaridad con nuestra causa. Yo he dicho y ratifico que lo que hizo esta señora fue una provocación porque pretendía tapar la gira de Guaidó con su presencia sabiendo que iba a causarle problemas al Gobierno español. La explicación que hemos visto en los medios es que él quiso ir a evitar que ingresara, la verdad es que lo evitó. Ahora, si el Gobierno sabía que venía, a eso no tengo respuesta. Nosotros solicitamos formalmente una explicación al Ministerio de Exteriores, pero no nos respondieron.