donostia - Íñigo Errejón sigue desmarcándose de Podemos y ayer tomó el paso que en los últimos días le sugerían los dirigentes del que sigue siendo su partido: deja el escaño en el Congreso de los Diputados para evitar echar más leña al fuego en su pugna con el sector de Pablo Iglesias y “centrarse en lo importante”, en referencia a su candidatura de mayo en tándem con Manuela Carmena. De esta forma, Errejón abandona su cargo público, pero mantiene por el momento su puesto orgánico en la dirección de la formación morada como secretario de Análisis Estratégico. “Sigo siendo militante”, resumió.

Las peticiones entre los dirigentes de Podemos para que el antiguo número dos de la formación renunciara a su escaño habían sido numerosas en los últimos días, desde que el pasado jueves Errejón anunció que no concurriría a las autonómicas de Madrid con la marca de su partido, sino con la plataforma electoral Más Madrid, impulsada por la alcaldesa Carmena. En su comparecencia, el hasta ayer diputado justificó su decisión argumentando que “a veces lo correcto y lo cómodo no coinciden” y admitiendo la presión tras recibir “varias peticiones públicas” para que entregara su acta.

En ese sentido, cree que su decisión sirve para frenar “la fase de las disputas” y poner el foco en las elecciones de mayo. “Hay que rebajar el nivel de drama. He oído a dirigentes de mucho peso de mi partido hacer afirmaciones gruesas en medios de comunicación sobre que tengo que entregar mi acta, y así lo hago”, afirmó. Sin embargo, lamentó que ninguno de los miembros de la dirección le haya contactado para demandarle explícitamente su renuncia al cargo. “Me habría gustado”, reconoció.

En efecto, aunque en los medios de comunicación dirigentes del partido han señalado la puerta de salida a Íñigo Errejón, no se le ha expulsado del partido ni se le ha abierto siquiera algún tipo de expediente sancionador o medida de castigo. En el partido de Pablo Iglesias hay temor a la división y a que se produzca una escisión en toda regla, y abogan por el planteamiento de que es el propio Errejón el que ya se ha situado fuera de Podemos. “No se puede echar a alguien que ya se ha ido”, argumentan. De cualquier manera, las intervenciones de Pablo Echenique la semana pasada y de Noelia Vera -ayer mismo antes de conocerse la renuncia- dejaban claro que la dirección no esperaba otra cosa que la renuncia al escaño del secretario de Análisis Estratégico.

Con todo ello, los de Pablo Iglesias vuelven a encarar otra semana complicada, incapaces de poner freno a sus incesantes problemas internos, acrecentados desde el plante de Errejón en la negociación con IU -al no aceptar como número dos en la candidatura a Sol Sánchez-, que le ha llevado a renunciar finalmente a concurrir con las siglas de Podemos y a hacerlo bajo el paraguas de Manuela Carmena. Casualmente, será la propia Sol Sánchez la que sustituya a Errejón en el escaño del Congreso, al ser la siguiente en la lista de Unidos Podemos.

“podemos tatuado en la piel” Por el momento, y aunque renuncia al escaño, el todavía secretario de Análisis Estratégico se niega en redondo a abandonar la formación morada. “No podría dejar Podemos ni aunque quisiera. Lo he fundado y lo llevo tatuado en la piel, y sigo siendo militante de Podemos”, argumentó en la rueda de prensa en la que anunció su renuncia al acta de diputado. Asimismo, Errejón aseguró que paga “muy tranquilo” el precio de haber adoptado “la decisión correcta”, ya que él no llegó a las instituciones para “estar en política”, sino para “hacer política”.

Respecto a su candidatura por la plataforma Más Madrid, Errejón cree que todavía hay margen de entendimiento con Podemos para pactar una única lista y evitar la división en la izquierda, y además atraer al proyecto a los desencantados. “En este momento tenemos ante nosotros una tarea hermosa, volver a hablar con los que faltan, gente que está ilusionada pero que ha perdido el contacto o la confianza con los partidos, e incluso a toda la gente que no pudimos convencer”, defendió en ese sentido.

Sin embargo, en la dirección nacional de Podemos dan por rotos todos los puentes tras los últimos movimientos de Errejón y confirman que competirán contra él, presentando una lista propia para las autonómicas, cuyo cabeza de lista aún se desconoce. “Nos vamos a presentar rotundamente con una candidatura de Unidos Podemos, como hemos hecho en el Congreso y como han marcado en consultas los inscritos en la Comunidad”, afirmó la portavoz Noelia Vera. Por ello, y salvo sorpresas, se producirá la situación enrevesada de que la formación morada apoyará al Más Madrid de Carmena en el Ayuntamiento madrileño, pero competirá contra el Más Madrid de Errejón en la Comunidad.