¿Qué personaje de la serie 'Aída' es como los vascos? Una influencer lo tiene claro
Ainhoa Longares asocia a los personajes de la serie con territorios del Estado en base a su personalidad
Las redes han conseguido que viejas películas o series sean capaces de mantenerse vivas durante años. Una de ellas es Aída, que aunque puso punto y final a sus emisiones hace más de 10 años en Telecinco, sigue muy viva en el recuerdo de la gente.
Uno de los vídeos virales del momento es uno en que la zaragozana Ainhoa Longares ha compartido en su Instagram. En el post, la creadora de contenido asocia los personajes de la serie a territorios del Estado en base a su personalidad, y la influencer considera que el personaje que coincide con la forma de ser de los vascos en Jonathan, ya que pese a ser "bruto" y "cabezón", es un "buenazo", lo que coincide con la imagen de personas leales y bondadosas que tienen los vascos en el Estado.
Actor desde niño
David Castillo, nacido el 16 de octubre de 1992 en Madrid, es un actor ampliamente reconocido por su papel de Jonathan García en la exitosa serie de televisión Aída, emitida entre 2005 y 2014.
Desde temprana edad, Castillo mostró inclinación por las artes escénicas, iniciando su carrera en el mundo del espectáculo cuando aún era un niño. Su participación en Aída lo convirtió en un rostro muy popular de la televisión española, donde interpretó al hijo de Aída (Carmen Machi), un personaje entrañable y carismático que creció junto al propio actor ante los ojos del público.
Tras el final de Aída, David Castillo decidió alejarse del foco mediático y concentrarse en su formación actoral. Se graduó en Arte Dramático por la Real Escuela Superior de Arte Dramático (RESAD) de Madrid, demostrando su compromiso con la profesión más allá de la fama televisiva. Posteriormente, se enfocó en el teatro, participando en montajes como La avería, El banquete, y La vida es sueño, donde fue aclamado por su madurez interpretativa.
A lo largo de su carrera, ha apostado por trabajos escénicos más arriesgados y complejos, distanciándose de los roles juveniles que lo lanzaron a la fama. Su evolución como actor ha sido bien recibida por la crítica, destacando su versatilidad, disciplina y crecimiento artístico.
David Castillo representa un ejemplo de transición exitosa de actor infantil a intérprete adulto, con una trayectoria que combina popularidad televisiva y rigor teatral. Con una actitud reservada respecto a su vida privada y una evidente pasión por el arte dramático, Castillo sigue desarrollando una carrera sólida en los escenarios, ganándose un lugar respetado en la escena cultural española.