- Esta noche abre sus puertas el estudio de The Dancer en La 1 para descubrir quién es el mejor bailarín del Estado. Grupos, dúos y aspirantes individuales de todos los puntos del país lucharán para que su excelencia sea reconocida. El ganador recibirá el título del mejor bailarín y un premio en metálico de 25.000 euros.

La directora de Entretenimiento de TVE, Toñi Prieto, explicó que “buscamos un talent de calidad y con The Dancer queremos inculcar la pasión por la danza a los espectadores”, porque “bailar es terapéutico”. “The Dancer está lleno de emociones, de actuaciones impredecibles, esfuerzo y concursantes muy peculiares de los que vamos a aprender mucho”, remarcó. Para Nathalie Garcia, CEO de Fremantle, “es un honor, una responsabilidad y un sueño cumplido llevar un trabajo así, lleno de valores, a una televisión pública”. “Un formato de baile transmite unos valores que se necesitan mucho, ahora y siempre: esfuerzo, disciplina y el hecho de que las cosas se consiguen porque hay un trabajo duro detrás”.

Los tres capitanes también están ilusionados con el formato y la adaptación. “La química entre nosotros ha sido brutal”, asegura Rafa Méndez. Lola Índigo tenía muchas ganas de ser capitana “porque siempre me ha gustado enseñar y ayudar a los bailarines, y eso es The Dancer”. Miguel Ángel Muñoz agradeció a RTVE que siempre lo saque de su zona de confort con estos proyectos: “Me enamoré como espectador del The Dancer británico y quería estar en este proyecto con un talento y un casting excepcional. Los presentadores también destacaron el talento y la emoción que habrá en The Dancer. “Es un programa magnético, un imán que te atrapa”, aseguró Ion Aramendi y confirmó Sandra Cervera: “Estamos haciendo un programa desde la verdad, y desde ahí, el talento y el esfuerzo van a trascender la pantalla”.

Casi 100 bailarines, de entre 8 y 60 años, participaron en un casting en el que tanto profesionales como amateurs pudieron demostrar su pasión por el baile y la danza. Será un programa abierto a todos los estilos: desde ballet clásico, pasando por baile contemporáneo y bailes de salón, a movimientos tan de moda como el twerk y el dance hall. Los pasos para montar una coreografía, el estudio de la danza, las historias personales de sus protagonistas o la capacidad para emocionar a través del baile serán algunos de los puntos clave.

Miguel Ángel Muñoz, Lola Indigo y Rafa Méndez se disputarán tener a los mejores en su equipo. Ion Aramendi y Sandra Cervera serán los maestros de ceremonias de la adaptación española de este formato de éxito mundial creado por Simon Cowell (Got Talent, Factor X) y que produce RTVE en colaboración con Fremantle.

Uno a uno, los concursantes pasarán por el estudio de audiciones, presidido por un gran espejo. Será el público en plató quien decida si siguen en el programa: si el 75% de los asistentes da su apoyo, el gran espejo de la sala de baile se abrirá y, para su sorpresa, dejará de bailar para sí mismo para hacerlo delante de público y capitanes.

The Dancer será un gran espectáculo que contará con un impresionante plató de 1.500 metros cuadrados. Los artistas se moverán entre siete sets de grabación donde trabajarán sus coreografías y clases de baile: la recepción, el plató, dos pasillos de totales y recursos, un set de digital, la sala de calentamiento, la sala de los alegatos y el exterior del estudio de baile. El imponente espejo que preside el estudio de baile, pieza clave de la mecánica de audiciones, cuenta con tres puertas motorizadas sincronizadas con 2.500 kg de pantalla y 1.000 kg de espejos. El plató está iluminado con 290 proyectores y cuenta con 29 cámaras de tecnologías punteras. Habrá 850 metros de led escenográfico repartido, entre otros, en 65 metros cuadrados de pantalla gigante para no perder detalle del espectáculo.