- En su papel, el actor "reimagina al antihéroe". Ganador del Emmy al mejor actor de una serie dramática, Rhys (Cardiff, 1974) toma el relevo del legendario Raymond Burr en la nueva Perry Mason, serie limitada que estrenó HBO ayer con un elenco sobresaliente como John Lithgow, Tatiana Maslany, Shea Whigham y Verónica Falcón.

Después del éxito de 'The Americans' (2013-2018), ¿por qué pensó que 'Perry Mason' era un proyecto ideal para usted?

-Más que nada, y de una manera muy simple, solo leo los guiones y veo si estoy interesado en la historia, si quiero saber cómo terminará esa historia, si me interesa el personaje que potencialmente me ofrecen... Ese es un tipo de test para mí. Y después de leer el primer capítulo de Perry Mason quería saber qué sucedería al final de la serie.

Obviamente, también me atraía el personaje de Mason, que fue una serie enorme. Y cuando los productores me dijeron que querían hacer una historia sobre sus orígenes, de cómo se convirtió en un abogado, me resultó increíblemente interesante encarnar a la persona real, ya que le mostraban como alguien herido y con muchas fracturas.

'Perry Mason' fue un gran fenómeno desde los años 50, pero ese era un panorama televisivo muy diferente al actual. ¿Cómo puede enganchar al público del siglo XXI?

-Creo que somos parte de un nuevo modo de hacer televisión. Hemos visto al antihéroe por ejemplo en Los Soprano con Tony Soprano. Y lo mismo con The Americans cuando animabas a los malos. Para mí, Perry Mason reimagina de alguna manera al antihéroe. No es un villano en sentido alguno, pero es una persona increíblemente herida. Y también las cosas que hace no son necesariamente las cosas correctas: estás interpretando a alguien que en último término busca justicia pero dando rodeos.

A este 'Perry Mason' le persigue su pasado, especialmente sus experiencias en la I Guerra Mundial.

-De alguna manera le define. Lo que le ha sucedido en el pasado sienta un camino muy rígido para él en el que siente que se le hizo algo muy injusto. Y como resultado, lo único que le importa ahora es asegurarse de que pase lo correcto, de que se haga justicia. Otra de las cosas que queríamos hacer era poner a Perry Mason en su propia vida. Vemos que le ha pasado de todo. Y una de esas cosas es la destrucción de su propia familia.

En los últimos años, hemos visto cambios en la televisión en la representación de la masculinidad más allá del típico macho fuerte. ¿Encaja este 'Perry Mason' en esas nuevas masculinidades?

-En los años 30 la masculinidad era algo muy diferente. Desde luego, ha evolucionado y ahora puede ser cosas de machos pero también cosas muy sensibles. Pero para la generación de hombres que venía de la I Guerra Mundial, el vocabulario emocional no estaba ahí para ayudarles a recuperarse en el plano psicológico.