La Oficina de la ONU para los Derechos Humanos pidió ayer a Francia que aborde seriamente “los profundos problemas de racismo y discriminación” de sus fuerzas del orden, después de la muerte del joven de origen norteafricano Näel el 27 de junio en el suburbio parisino de Nanterre, tras ser abatido a tiros por un policía.

En una rueda de prensa celebrada en Ginebra, la portavoz de la Oficina Ravina Shamdasani también pidió a los miles de personas que se están manifestando en Francia por la muerte del joven de 17 años que expresen sus protestas de manera pacífica. Sólo en la madrugada del jueves a ayer fueron detenidas 667 personas en todo el país, según el Ministerio del Interior de Francia.

Shamdasani citó varios casos de saqueos callejeros en las últimas noches en distintas ciudades francesas y reportó que varios agentes de Policía han resultado heridos durante las protestas.

En este sentido, la portavoz pidió a la Policía francesa que haga uso de la fuerza respetando los principios de legalidad, necesidad, proporcionalidad, no discriminación, precaución y rendición de cuentas.

Del mismo modo, instó a las autoridades del país a que investiguen con celeridad cualquier uso indiscriminado de la fuerza.

En el pasado, el Comité de la ONU para la Eliminación de la Discriminación Racial ya expresó su preocupación por los comportamientos racistas de los agentes del orden franceses durante los controles policiales de identidad.

Francia aseguró que “toma nota” de las críticas del Alto Comisionado, pero salió al paso de las mismas señalando que cualquier acusación que aluda a un posible racismo “sistémico” en el seno de la Policía es “totalmente infundada”, algo que quedaría demostrado en los informes periódicos a los que se somete el país en materia de Derechos Humanos.

“Las fuerzas del orden están sometidas en Francia a un nivel de control interno, externo y judicial como pocos países conocen”, alegó en un comunicado el Ministerio de Exteriores galo, que defendió que son precisamente la Policía y la Gendarmería quienes combaten “el racismo y cualquier forma de discriminación”.