Este año se celebra un importante hito para la movilidad sostenible vasca. YAunque parezca un concepto moderno, hace más de 100 años Euskadi fue pionera en cuanto a movilidad eléctrica. Concretamente, se cumplen 125 años de la puesta en marcha del primer tranvía eléctrico del Estado, un hito histórico que tuvo lugar con la línea de Bilbao a Santurtzi. Fue el 1 de febrero de 1896, y un año después, el 29 de octubre de 1897, arrancaba en Gipuzkoa, con el primer tranvía eléctrico que iba de Donostia a Errenteria. Más tarde, llegarían los precursores de la movilidad eléctrica con el primer tranvía ecológico, de Bilbao a Durango y Arratia (1902); y la apuesta tranviaria por la hidroelectricidad, en el urbano de Donostia y el interurbano de Donostia a Tolosa (1903-1912).

Los inicios del siglo XX están plagados de fechas importantes en cuanto a hitos en movilidad: en 1902, se inaugura el primer ferrocarril eléctrico, que asciende el monte Ulia (Donostia); un año más tarde (1903), llega el segundo ferrocarril eléctrico, que une Donostia con Hernani; en 1907, se pone en marcha el primer teleférico eléctrico de España, también en el monte Ulia de Donostia; y en 1912 comienza a funcionar el primer funicular eléctrico de Euskadi en el monte Igeldo.

Esta Semana Santa el Museo Vasco del Ferrocarril acogerá una exposición en la que dará cuenta de la evolución de este medio de transporte en Euskadi. La muestra estará abierta al público en el horario habitual del centro.

El objetivo de las diversas acciones de divulgación que serán impulsadas a lo largo de 2021 desde el Departamento de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes del Gobierno Vasco y el Museo Vasco del Ferrocarril de Euskotren, es recordar a la sociedad vasca, y más en la celebración también del Año Europeo del Ferrocarril, la importancia de la tracción eléctrica en los trenes, metros y tranvías, y el papel pionero que en su desarrollo jugó Euskadi.

Hoy en día, Euskadi cuenta con la mayor densidad de ferrocarriles eléctricos del mundo, solo superada por Suiza. Con unos servicios que suponen una alternativa de movilidad cada día más limpia y eficiente. La movilidad eléctrica es la alternativa más sostenible. Y el medio de transporte más eficiente es, sin duda, el ferrocarril: alta velocidad, trenes de mercancías, cercanías, metros o tranvías.