La Audiencia de Gipuzkoa ha denegado la puesta en libertad provisional del hombre que fue detenido el pasado mayo en la localidad lapurtarra de Hazparne, acusado de la muerte de un varón de origen magrebí ocurrida en Irun el 14 de abril.

El Servicio de Investigación Criminal Territorial de Gipuzkoa se hizo cargo del caso tras el hallazgo del cadáver con signos de violencia en un descampado del barrio San Miguel de Irun.

Según han informado a EFE fuentes del caso, la autopsia reveló que el varón falleció estrangulado, aunque también presentaba numerosos cortes en los brazos, estaba desnudo, tenía la cara desfigurada por golpes y un palo introducido a la altura de la nariz. Su ropa y su calzado fueron localizados en las inmediaciones del lugar.

Grabaciones de cámaras

Durante la investigación, las grabaciones de varias cámaras y otros indicios permitieron determinar que la víctima habría estado aquella noche en compañía de otro varón.

Más adelante, la Policía concluyó que este desconocido era un hombre de nacionalidad francesa al que logró identificar y comprobar cómo aquella madrugada había abandonado Irun en dirección a Hendaia (Francia) en un turismo de color gris.

Según las fuentes, la investigación permitió descubrir asimismo restos de genéticos del arrestado en el cuello de la víctima, fallecida, como recoge el informe médico forense, por una "anoxia encefálica por compresión cervical por estrangulación".

Localizado en Baiona

Transcurrido un tiempo, el pasado 20 de abril el sospechoso fue localizado en un establecimiento comercial de Baiona junto al citado automóvil.

Dos días después, el hombre, de 40 años y contra el que se había emitido una orden europea de detención y entrega, fue arrestado en Hazparne con la ayuda de la Policía francesa.

El detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Guardia de Irun, que ordenó su ingreso en prisión provisional a la espera de juicio en una decisión ratificada posteriormente por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de la localidad fronteriza.

Confirma la prisión

No obstante, el arrestado apeló esta resolución ante la Audiencia de Gipuzkoa, cuya Sección Primera ha confirmado ahora la decisión del juzgado de Irun y ha rechazado su puesta en libertad.

Al igual que el juzgado irunés, la Audiencia justifica su negativa a excarcelar al sospechoso en la gravedad de los hechos que se investigan y la "posibilidad "cierta y real" de que se sustraiga a la acción de la justicia", debido a las importantes penas que eventualmente se le podrían imponer por la posible comisión de un delito de homicidio (entre 10 y 15 años de prisión) o de asesinato (de 15 a 25).

Asimismo, recuerda que la posibilidad de eludir la justicia se acrecienta por la inexistencia de arraigo en España, ya que se trata de un ciudadano francés que no tiene vínculos sociales o laborales en nuestro país, al tiempo que pone de manifiesto la "elevada solidez" de los datos indiciarios "de contenido incriminatorio" contra el investigado, fundamentados básicamente en pruebas periciales de "carácter objetivo".