Faltan pocas horas para que Bruce Springsteen actúe en Donostia tras nueve años sin hacerlo. Las dos únicas fechas del cantante norteamericano en el Estado este 2025 serán en la capital guipuzcoana, lo cual hará que muchas personas de fuera del territorio se acerquen a disfrutar de la música del Boss

Se calcula que aproximadamente 80.000 personas vendrán estos días a la ciudad. Por ello, Donostia se prepara para un desembarco masivo de seguidores de Springsteen. Quien más de cerca va a notar el impacto será la hostelería de la zona de Anoeta, donde ya se preparan para unos días de auténtica locura.

“Va a ser la primera vez que vivamos algo así”, comenta a este periódico Humberto Benítez, del Victoria 10 gastrobar, local a escasos metros de la parada de Topo de Anoeta. “Llevamos aquí tres años con el bar, por lo que nunca hemos vivido un concierto de Bruce Springsteen, es algo nuevo para nosotros”. 

Las provisiones ante la llegada de tantos miles de personas son fundamentales para poder afrontar el reto de atender a todas: “Hemos cogido muchos más litros de cerveza que para un fin de semana normal”, cuenta Benítez.

Jon Catalán, de Arkupe taberna, también se prepara “cogiendo más género”. “Va a haber mucho más trabajo que en un partido de los grandes de la Real. Lo que pasa es que te preparas igual porque el local da para lo que da”, explica, asegurando que solo se puede “estar preparado lo mejor posible porque la avalancha viene y te pasa por encima si no lo estás”.

El precio de las plazas en los hoteles de Donostia se ha disparado aunque todavía quedan habitaciones libres

Al igual que Catalán, Andoni Garciarena, de la cervecería Txamarta, también se está preparando “como si fuera un partido de fútbol, pero más grande. Estamos acostumbrados a trabajar con eventos potentes”. Este año, además de los conciertos, también se ha notado el partido entre el Aviron Bayonnais y el Pau, de rugby, cuando el pasado mes de abril miles de aficionados del otro lado de la muga se dieron cita en Donostia para animar a su equipo. “Yo creo que el concierto de Bruce del sábado y el día del rugby estarán más o menos al mismo nivel de beneficios. No creo que en el del martes se mueva tanta gente”, analiza Garciarena.

Es por ese nivel de afluencia que los bares van a necesitar refuerzos en la plantilla. Todos los establecimientos reconocen que van a contar con más personas que habitualmente. Por ejemplo, en el bar Maite, “siempre que hay un concierto o un partido grande necesitamos refuerzos. Necesitamos dos ayudantes más”, asegura Andrea Flores, camarera del establecimiento. En este bar ya tienen cientos de vasos de plástico en la barra preparados para la gente que venga a disfrutar del ambiente previo.

Al igual que el bar Maite, los demás también tendrán más personas para hacer frente a la marea de gente que se espera. En la cervecería Txamarta estarán “siete u ocho personas. Normalmente somos seis, pero en una ocasión así hay que cambiar mucho barril y viene bien que haya gente fuera vigilando, trayendo hielos, cambiando barriles y demás. Además, solemos montar una barra aparte, por lo que necesitamos más gente que de costumbre”, enumera Garciarena.

Un punto a favor para estos bares es que no les pilla sin rodaje. La semana pasada, con el concierto de Fermin Muguruza, algunos de estos hosteleros vivieron otra jornada frenética. Humberto Benítez, del Victoria 10 gastrobar, no pensaba “que fuera a haber tanta gente, pero se notó muchísimo, fue un día de mucho trabajo”. Jon Catalán comenta risueño que ese día fue “entretenido” y Andrea Flores, del bar Maite, afirma que “hubo mucho más movimiento que un día normal”. Andoni Garciarena, del Txamarta, dice haber podido “practicar con el concierto de Muguruza. Vino más gente de lo que creíamos. Antes del concierto la gente viene animada y se consume más”.

Entre el primer concierto y el segundo hay tres días de distancia. “Algo de movimiento habrá entre los dos. La gente que viene a montar el escenario, alguno que viene de fuera y quiere ver la ciudad y el sitio del concierto… Ese goteo de personas siempre se nota un poquito”, reflexiona Jon Catalán. 

Preguntados por si esperan hacer la mejor recaudación de 2025, la hostelería de los aledaños de Anoeta coincide en que probablemente sí. “Creo que va a ser la mejor fecha para el bar, aunque este año hemos tenido rugby, otros conciertos…”, detalla Benítez. “Estos eventos nos impulsan y ayudan a los locales de Amara cercanos al estadio, porque nos hacen mejorar la estabilidad de las ventas”. 

Catalán también considera que “serán los mejores días del año” para su bar. “Al ser dos conciertos en cuatro días se podría decir que sí. La mejor semana, seguro”. “Estoy segura de que va a ser el mejor día del año”, concluye, por su parte, Flores

Más de mil barriles de cerveza ya están preparados en el interior de Anoeta para ser servidos durante el concierto del ‘Boss’

Hoteles, casi llenos y más caros

Donde también se nota el efecto Springsteen es en los hoteles de la ciudad. A pesar de que aún quedan plazas, muchos de ellos rozan el lleno. Pero, sobre todo, es en los precios donde se percibe que este fin de semana no es como cualquier otro en la capital donostiarra. Diversos establecimientos hoteleros han contado a este periódico que, ante la gran demanda por ver al Boss en concierto, el coste de pasar una noche en una habitación ha crecido mucho. Muchas personas reservaron con mucha antelación, al saberse desde hace muchos meses que Springsteen iba a recalar en Donostia.

Sin embargo, al ser fechas de verano, el nivel de ocupación es parecido a otros fines de semana de junio, julio o agosto. Por lo que afrontan estos días con tranquilidad.

Más de mil barriles

Por otro lado, varios días antes del concierto ya son visibles los preparativos para dejar todo en condiciones. Uno de los productos estrella en estos casos es la cerveza, que no se bebe únicamente antes del espectáculo. Antton Aramburu, encargado de almacén de Sein Izarra Zerbitzuak, cuenta a este periódico, mientras trabaja poniendo todo a punto en Anoeta, que han estado reponiendo “varios cientos de barriles vacíos tras el concierto de Fermin Muguruza”. Sumados los que han traído estos días para el Boss a los que sobraron del concierto del irundarra, habrá más de mil barriles disponibles en el estadio.