La única clarisa de Belorado, más allá de las cinco mayores que no firmaron el manifiesto de salida de la Iglesia, Sor Amparo, ha afirmado que fue un pequeño grupo de las religiosas las que urdieron el cisma en secreto.

Sor Amparo, que ahora está en Vitoria en un convento alavés donde está "muy bien acogida por las hermanas de esa comunidad", ha asegurado que fue una sorpresa lo ocurrido en Belorado, "como lo llevaron entre ellas en un grupo, que nadie pudo saber hasta que se dio la sorpresa".

En ese momento fue cuando se levantó de la reunión y le dijo a Pablo Rojas, el supuesto obispo, "que eso no era así". No sabe "lo que buscan" sus ex compañeras, afirma que no lo entiende y que ella es "la primera" que abandonó esa idea. Además, ha lamentado la situación y ha reconocido que es difícil saber "lo que buscan" porque "es un poco raro todo".

La religiosa ha señalado que no le ha gustado "ver la televisión y las noticias" porque le da "pena que hayan llegado a lo que han llegado" y ha agregado darle lástima después de que hayan estado "viendo una vida de comunión, al menos exteriormente, de fraternidad, y de repente, que salga todo esto...".

"Con luz y taquígrafos"

El arzobispo de Burgos, Mario Iceta, ha asegurado que expondrá "con luz y taquígrafos" su defensa ante las acusaciones de coacciones, administración desleal y revelación de secretos que pesan sobre él tras la denuncia presentada por las exmonjas del convento de Belorado. "Vengo a mostrar la relación torticera de los hechos denunciados", ha afirmado Iceta a su llegada este miércoles al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Briviesca, donde ha acudido en calidad de investigado y como comisario pontificio de los monasterios de Belorado, Orduña y Derio.

Acompañado de sor Amparo, quien abandonó el convento un día después del cisma, y de sor Carmen, secretaria de la Federación de Clarisas Nuestra Señora de Aránzazu, el prelado ha comparecido en medio de un fuerte dispositivo de seguridad y una notable expectación mediática. Iceta ha explicado que ha aportado documentación que, en su opinión, desmonta las acusaciones, insistiendo en que su papel como comisario pontificio lo convierte en representante legal y administrador de los conventos implicados.

El arzobispo ha detallado que la Federación de Clarisas ha destinado ya 360.000 euros para cubrir gastos corrientes como luz, gas, seguros, alquiler de vehículos, multas e impuestos, así como salarios de once trabajadores, en los tres conventos que, según ha dicho, las exmonjas "ocupan de manera ilegal".

Exmonjas

Por su parte, la exabadesa de Belorado, Laura García de Viedma, ha defendido la denuncia presentada contra Iceta junto a las también exclarisas sor Sion (Susana Mateo), sor Belén (María Ana Paz) y sor Israel (Isabel Jiménez). "Hemos recibido un perjuicio tan fuerte, tan prolongado todos estos meses, que sí deseamos que se escuche la voz de la comunidad", ha señalado. Sor Sion, por su parte, ha subrayado que atraviesan una etapa de "muchísimo sufrimiento" y han querido que "la ley pusiera un límite".

Durante la mañana, las cuatro exreligiosas han comparecido ante el juzgado para ratificar su denuncia. Posteriormente, el arzobispo ha prestado declaración como investigado.

La vista judicial se celebra un año después de que las exmonjas anunciaran su salida de la Iglesia católica y tiene lugar tras la decisión de la Audiencia Provincial de Burgos de estimar el recurso de las denunciantes. El tribunal revocó el auto de sobreseimiento provisional dictado por el juzgado de Briviesca, al considerar que era prematuro y carecía de motivación, ordenando la continuación de la instrucción con la toma de declaraciones.