La renovada estación de ferrocarril de Eusko Trenbide Sarea (ETS) de Zumaia, que ha sido objeto de una profunda reforma por la que se ha ensanchado el paso inferior y se le ha dotado de ascensores, ha entrado en servicio este lunes mientras continúan los trabajos para la construcción de las nuevas cocheras.

La consejera de Movilidad Sostenible, Susana García Chueca, ha visitado las instalaciones que soportan un tráfico medio superior a las 1.600 pasajeros al día. Hasta hoy, los usuarios accedían a la terminal desde el cruce de Hegoalde con Estazioko Kalea a través de un paso inferior que enlazaba con los andenes mediante rampas y escaleras fijas.

El paso inferior anterior, de 2,4 metros de anchura, se ha duplicado y se ha ampliado hasta alcanzar los 5 metros, mientras los nuevos ascensores tienen capacidad para 8 personas y están adaptados a personas con movilidad reducida.

García Chueca ha señalado que todas estas mejoras son "clave para facilitar que las personas dejen el coche y se suban al tren en el día a día, para ir a trabajar o a estudiar".

El edificio, de estilo neovasco, fue proyectado por el arquitecto guipuzcoano Ramón Cortázar y hasta 1981 fue una estación de interconexión entre las líneas Bilbao-San Sebastián y la del ferrocarril del Urola, que hacía el trayecto Zumarraga-Zumaia, con dos edificios diferentes para cada línea. Una vez que cesó la explotación del ferrocarril del Urola en 1988, se eliminó uno de los edificios.

Cocheras

El final de las obras de reforma de la estación se ha solapado con el arranque de la construcción de las cocheras que se ubicarán en la explanada dentro de la plataforma de vía de ancho métrico entre Bilbao y Donostia, a la altura de los depósitos y talleres de autobuses de Euskotren.

Las nuevas instalaciones, que ocuparán una superficie de alrededor de 2.000 metros cuadrados, tendrán capacidad para albergar 5 unidades y para tareas de mantenimiento. Incluirán una máquina de lavado y un sistema de arenado para mejora de la adherencia entre ruedas y carriles, que consta de 8 surtidores y un silo de 20 metros cúbicos de capacidad.

Con la puesta en marcha de la variante soterrada del Topo en Donostia desaparecerá la actual estación de Amara, que aloja trenes.

Con el objeto de optimizar el servicio y para disponer de unidades en las cabeceras de las líneas ferroviarias que permitan tener mejores frecuencias, el departamento de Movilidad Sostenible ha apostado por un punto estratégico como Zumaia para construir las cocheras que completen la disposición de los depósitos de trenes existentes en Araso (Irun).

Asimismo ETS ejecuta en la actualidad una nueva área de mantenimiento en ese ámbito, que completa las infraestructuras ferroviarias en Zumaia.