"Nuestro único objetivo ha sido aportar un granito de arena ante tanta catástrofe”. El zarauztarra Igor Zabala, casado con una nicaragüense y coordinador de Latinos en Gipuzkoa, agradece el apoyo recibido desde todo el territorio para canalizar la ayuda necesaria a Valencia, epicentro de la catástrofe natural causada por la dana hace casi un mes, que deja 220 muertes y miles de damnificados.

En medio de complejos duelos de la población afectada y de las acusaciones cruzadas entre el Gobierno regional valenciano y el Pedro Sánchez, desde el territorio no han cesado las muestras de solidaridad, como la de este grupo que se organiza a través de las redes sociales y que, con más de 600 seguidores, se vio en la necesidad de echar una mano ante tanto desastre.  

Una decena de voluntarios se ha encargado durante este tiempo de las labores logísticas para enviar a Valencia una decena de furgonetas cargadas con productos de primera necesidad recogidos en diferentes puntos de la geografía guipuzcoana: Zarautz, Tolosa, Ordizia, Donostia, y el Polígono 27 de Martutene

“La respuesta de todo el territorio ha sido impresionante, con la implicación de medio centenar de empresas, asociaciones, Ongs y cinco entidades valencianas con las que hemos mantenido el contacto directo”, señala el coordinador de esta agrupación, convertida a su vez en lugar recogida de las bicicletas enviadas por la Asociación de Ciclistas Urbanos de Donostia, Kalapie. “Sólo en una semana se consiguieron casi cien bicicletas, de las cuales 25 guardamos en el almacén de Martutene y ya han sido enviadas al municipio de Torrent. La respuesta ha sido increíble. Queremos agradecer a Kalapie que haya contado con nosotros”, expresa Zabala, que da cuenta de una lista interminable de material enviado: productos de alimentación, de limpieza, ropa, colchones, bicicletas, patinetes, cunas, mascarillas, guantes, palas, escobas, fregonas o recogedores. 

Los últimos envíos 

“Asociaciones de Irun desplazadas a Valencia se pusieron en contacto con nosotros y nos han facilitado personal con sus propias furgonetas para llevar todo ese material a diferentes localidades como Torrent, Alfafar y Alcasser”, explica el coordinador. Este próximo fin de semana tendrá lugar el último envío dentro de esta misión humanitaria. Uno de los destinos será Benifaió, que el 29 de octubre vivió el primer tornado de su historia dejando a su paso una catástrofe sin precedentes. El segundo municipio al que tiene previsto desplazarse el grupo de voluntarios es Algemesí, donde la asociación de comerciantes ha cifrado en más de 13 millones de euros los daños causados a sus 200 asociados por la riada, que deja un futuro incierto para el comercio local de uno de los municipios más afectados por la dana.

El sector se muestra convencido de que la actual situación hará que algunos negocios no vuelvan a abrir, y considera que la dana marcará “un antes y un después, superando con creces el impacto de la riada de 1982” tras la rotura de la presa de Tous. 

Desde Gipuzkoa, como dice Zabala, se ha querido “aportar un granito de arena”, y en ese sentido el colectivo da las gracias “a todas las personas donantes del territorio, voluntarios, empresas, y asociaciones que han colaborado con nosotros. Como grupo de voluntarios que somos estamos felices por toda la labor que hemos hecho y también queremos dar las gracias de corazón a todos los que habéis puesto vuestros propios medios de transporte para ayudar a llevar los víveres. Eskerrik asko Gipuzkoa, y mucho ánimo para todos los damnificados”, señalan en una nota remitida a los medios.