La presión aumenta sobre todo en los municipios próximos a Donostia. En los últimos seis meses, varios de los municipios que encabezan el número de solicitudes de vivienda protegida de Etxebide en relación a su población, han visto aumentado el número de demandas de forma apreciable. En concreto, localidades como Errenteria, Hernani, Lasarte-Oria, Pasaia y Urnieta, que entre las cinco suman poco más de 101.0000 habitantes, han registrado un total de 334 solicitudes más en sólo seis meses: un 3,95% más; mientras que en Donostia, con sus más de 188.000 vecinos, las peticiones de VPO aumentan sólo en 165 (+1,15%)
El Gobierno Vasco acaba de publicar esta semana los datos de demanda de vivienda pública en Etxebide durante el tercer trimestre del año por municipios, una foto que según reconoce el propio Ejecutivo “puede ayudar tanto a los propios municipios como a los promotores a ajustar la oferta” y que dibuja claramente una Gipuzkoa de dos colores, con una demanda muy superior en el cinturón que rodea a Donostia, donde el número de solicitudes de vivienda protegida se llegan a triplicar en relación a otros municipios del interior.
Y también una Gipuzkoa de dos colores en cuanto a posibilidades económicas de las personas que quedan excluidas del mercado libre, en la que hay municipios con solicitantes que declaran unos ingresos medios de 26.155 euros anuales, el caso más extremo, en Getaria; y otros como Eskoriatza y Legazpi, con personas solicitantes que ganan una media de 14.686 euros al año, casi la mitad.
Las tendencias generales son las mismas. El alquiler sigue siendo la fórmula más demandada de vivienda pública. Siete de cada diez solicitantes se decanta por esta fórmula, la más utilizada también por las administraciones. Es cierto que es la fórmula por la que se están decantando las administraciones locales últimamente, pero también es cierto que es la única alternativa para muchas personas que no llegan ni al Salario Mínimo Interprofesional.
En seis meses
Si cogemos los datos de Donostia, sí vemos, sin embargo, que en los últimos seis meses ha aumentado ligeramente el número de demandantes de vivienda pública en propiedad. Pero no todos pueden. Hablamos de solicitantes que ingresan 27.607 euros al año, frente a los 16.595 de media que ingresan los que reclaman una de alquiler.
La otra tendencia es la de la tipología de los demandantes de vivienda. De nuevo si cogemos Donostia como referencia, que es un buen ejemplo en este caso, vemos que el dos de cada tres peticiones son de solicitantes únicos, el 65,67%, frente a un 16,42% de parejas, y un restante 18% de familias de tres o más miembros.
Donostia, Astigarraga y Zarautz
Donostia, Astigarraga y Zarautz son tres puntos de referencia siempre en esta estadística que trimestralmente publica el Gobierno Vasco. Las De este modo, Astigarraga es el municipio que más demandas de vivienda pública tiene en relación a su población: un 15%. Su caso es único. Además, se da la particularidad de que es el único municipio en el que la proporción de solicitantes es netamente superior de gente no empadronada en Astigarraga. Es decir, es la opción preferente para muchas personas que siendo de Donostia, y no pudiéndose permitir una opción en el mercado libre, sondea esta opción.
No es casualidad que varios de los municipios que rodean a Donostia se sitúen también entre las que más solicitudes tienen en relación a su población. Después de Zarautz, que es la segunda localidad con más solicitudes en relación a su población (11,05%), se sitúan en esta lista pueblos como Hernani (9,62%), Urnieta (9,56%), Pasaia (9,52%) y Lasarte-Oria (9,04%).
En esos mismo niveles se sitúa Hondarribia (9,36%), por ejemplo, y Oiartzun en menor medida (8,26%). Son los únicos que superan a Donostia, aunque Errenteria le anda cerca con un 7,58%. En el otro extremo encontramos municipios que son cabecera de comarca, como Zumarraga, con una proporción del 3,6% de solicitudes de vivienda pública en relación a la población del municipio. El propio Beasain, con un 3,84%, o Bergara, con un 3,15%.
Más referencias
Localidades como Irun (5,19%), Azpeitia (4,78%), Arrasate (5,44%), Tolosa (5,30%) y Eibar (5,07% )se sitúan en la media de Gipuzkoa, rondando el 5% de solicitantes de VPO en relación a su población.
La capital guipuzcoana tiene los alquileres y precios de compra de vivienda libre en niveles imposibles, con rentas medias rozando los 1.000 euros de media (982) de alquiler hace medio año. Y eso aboca a muchas personas a contemplar como única opción Etxebide, la vivienda pública. Son 14.512 las personas solicitantes de VPO en la capital, lo que representa un 7,68% de la población total del término municipal (188.000 habitantes).
Los ingresos medios de esas 14.512 personas que aspiran a una vivienda protegida en Donostia tienen unos ingresos anuales medios de 20.004 euros. Estaríamos hablando de una nómina que ni siquiera llega a los 1.200 euros netos en catorce pagas. De todos modos, no son muchos los municipios en los que los solicitantes de vivienda de Etxebide superen esa cantidad.
A pie cambiado
Sí tienen unos ingresos medios sensiblemente más altos las 2.560 solicitantes que buscan vivienda protegida en Zarautz. Este municipio es, junto a Getaria, una excepción, porque son justamente las dos localidades donde los términos se invierten completamente en relación a alquiler o compra. Un 63% de los solicitantes de viviendas públicas en Zarautz prefieren la compra. Tienen eso sí, unos ingresos medios de 24.825 euros anuales, mientras que la media en Gipuzkoa no llega a los 20.000.
Astigarraga es el tercer municipio donde la media de los solicitantes de vivienda pública es más alta: 23.055 euros.
En Gipuzkoa existen cerca de 29.000 solicitantes de vivienda pública y la cifra continúa en aumento, después de que en octubre de de 2023 se actualizasen los límites de ingresos para poder apuntarse en el registro de Etxebide tras muchos años congelados. Los límites máximos se aumentaron un 8,5%, situándolos en 43.753,71 euros para el alquiler y 56.094,5 para compra.
Se calcula que en los últimos dos años la demanda de vivienda protegida ha subido cerca del 10%. Es un indicador, según opinan desde el sector inmobiliario, de que “la oferta es insuficiente, más en Gipuzkoa”.