Imágenes sorprendentes de las mareas vivas en Gipuzkoa y no solo en primera línea de costa. El aviso de que las mareas vivas de este domingo podían ser históricas estaba lanzado por parte del Gobierno Vasco y así ha sido. Tanto en primera línea como en la segunda. Es el caso de Irun, que ha visto cómo tres de sus cuatro islas, las tres que se encuentran frente al bidegorri, han quedado anegadas por la crecida del río Bidasoa, motivado por la pleamar vespertina.
Hiru Kanale, Santiagoaurre y Galera han quedado prácticamente anegadas a primera hora de la tarde de este domingo para sorpresa de los pocos viandantes que paseaban por el bidegorri en una tarde lluviosa como consecuencia de la brorasca Monica, cuando estaba prevista el máximo de la marea 20 minutos antes de las 17:00 horas. La primera pleamar fue de madrugada, a las 4:15 horas. Buena parte de las tres islas ha quedado anegada. En el caso de Santiagoaurre, frente al bidegorri de Hendaia, por ejemplo, se ha librado de la inundación la parte más lejana de la desembocadura del mar, la que se encuentra frente al polideportivo de Azken Portu.
Uso de las islas
Lejos del uso vinculado al sector primario que tenían estas tres islas con agricultura y ganadería hace décadas, hoy en día solo la isla más próxima al barrio de Dunboa y la zona de Oxinbiribil (donde el Gobierno Vasco no permitió la puesta en marcha de un canal de aguas bravas), la de Hiru Kanale conserva actividad agraria.
Estas tres islas fluviales son tres de las principales que aún persisten al paso del tiempo, junto a la más conocida, camino de Behobia, Isla de los Faisanes, el condominio más pequeño del mundo, ya que durante seis meses su administración corresponde al Estado francés y los otros seis meses, al español.
En este enclave se firmó el Tratado de los Pirineos, al que entre otros acudieron el conde-duque de Olivares Luis de Haro y Guzmán, y el cardenal Mazarino para sellar la paz franco-española, que se sustanció en la boda entre Luis XIV y María Teresa de Austria en Donibane Lohizune en junio de 1660.
Riberas aluviales
Además de a estas islas, Irun no pierde ojo a otros terrenos de la ciudad, como Behobia, que hace apenas un par de años sufrió inundaciones. Con las mareas vivas más importantes, otras riberas aluviales de la ciudad como la de Alunda y Lastaola también se ven anegadas en parte.
Una realidad que pone el foco de manera cada vez más innegable en la planificación del futuro, como ocurre con muchas localidades costeras de Gipuzkoa y el cambio climático, que trae un paulatino e imparable crecimiento del nivel del mar.
Avisos de Azti
Los análisis de Azti evidencian que el mar Cantábrico crece a un ritmo entre 1,5 y 3,5 centímetros por década desde 1990, lo que lleva a los científicos a estimar un crecimiento entre 50 y 80 centímetros para finales de este siglo.
Dicho de otro modo: se espera que en el conjunto de la CAV crezca la superficie en riesgo de quedar bajo las aguas crezca un 12% para 2050, un rango que puede alcanzar entre el 24% y el 59% para el año 2100.
Junto con este fenómeno, el centro tecnológico vasco especializado en la investigación marina y alimentaria también advierte de que el oleaje que azota a la costa guipuzcoana aumenta por década alrededor de 16 centímetros.
