La aerolínea irlandesa de bajo coste Ryanair anunció este viernes que reducirá su calendario de vuelos para el verano debido a los retrasos en la entrega de aviones por parte de Boeing, lo que afectará a su tráfico de pasajeros anual.

La compañía radicada en Dublín confirmó hoy que prevé recibir del fabricante estadounidense 40 de los 57 aparatos B737-MAX8200 incluidos en un pedido que debía llegar "antes de finales del próximo junio".

Ryanair había diseñado un programa de vuelos para este verano bajo la asunción de que recibiría un mínimo de 50 nuevos aviones, pero el retraso le obligará ahora a reducir "aproximadamente 10 líneas de vuelos".

Menos horarios y frecuencias

"En el marco de una flota total de 600 aviones, esto provocará algunos cambios menores en los horarios y reducirá las frecuencias en las rutas existentes, en lugar de eliminar nuevas rutas", explicó la aerolínea, líder en Europa del sector de vuelos económicos.

Ryanair avanzó que prevé transportar entre 198 y 200 millones de pasajeros durante el próximo ejercicio fiscal, que comienza en abril, frente a los pronósticos anteriores que situaban su tráfico en torno a los 205 millones.

"Estamos muy decepcionados por estos últimos retrasos en las entregas de Boeing, pero continuamos trabajando con Boeing para maximizar el número de nuevos aviones B737 que recibiremos antes de finales de junio", declaró hoy en un comunicado el consejero delegado de la aerolínea irlandesa, Michael O'Lery.

Problemas en Boeing

El directivo reiteró que el fabricante estadounidense tiene el "apoyo incondicional" de Ryanair mientras trabaja en los "desafíos temporales" que afronta, al tiempo que confió en que solucionará los "retrasos de producción y problemas de control de calidad".

O'Leary comunicó el pasado enero que Ryanair ha duplicado, de seis a doce, el número de ingenieros que supervisan el proceso de producción de Boeing en la planta de Seattle, así como el de técnicos, de cuatro a ocho, que examinan la producción de la empresa Spirit AeroSystems en Wichita, una de las principales proveedoras del fabricante.

Ryanair adoptó esas medidas después de que un avión 737-9 MAX de Alaska Airlines perdió parte del fuselaje en EE.UU. en pleno vuelo el pasado cinco de enero.

La aerolínea irlandesa solo opera con aviones Boeing 737 y ha efectuado recientemente un pedido de más de 400 nuevos aparatos 737-MAX 8 y MAX 10.