Las precipitaciones de la borrasca Juan a su paso por la península ibérica, que preceden a una importante bajada de temperaturas este fin de semana, han causado inundaciones en varios puntos del país y han dejado a cientos de conductores atrapados en diversas carreteras de Soria por la nieve.

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé que la borrasca, que transita con rapidez de oeste a este peninsular, descargue hasta primera hora de la mañana del sábado, con especial fuerza y persistencia en el centro y el suroeste peninsular, sobre todo en el Sistema Central sur de la Ibérica y el noreste de la Meseta Sur.

Ante este temporal de nieve, heladas y viento que afecta a varias provincias, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha lanzado un mensaje en su red social X apelando a la precaución. "Tengamos mucha precaución y sigamos las recomendaciones de la @DGTes", dice.

También asegura Sánchez que los servicios de emergencia, como protección Civil, "están trabajando para garantizar la seguridad de todos".

Conductores atrapados en la nieve

La Unidad Militar de Emergencias (UME) acuartelada en Zaragoza se ha tenido que movilizar esta tarde para rescatar y ayudar a unas 600 personas atrapadas en unos 500 vehículos, retenidos por la nieve en diversas carreteras de la provincia de Soria, donde este fin de semana se esperan temperaturas de hasta -15 grados.

Fuentes de a Delegación del Gobierno en Castilla y León han explicado que la UME se ha desplazado para reforzar los servicios de emergencia en el tramo de la carretera N-122 que comunica la capital de Soria con Ágreda, municipio limítrofe con la provincia de Zaragoza, entre los kilómetros 115 y 148.

Se trabaja contra reloj para liberar a los conductores ante la bajada drástica de temperaturas previstas en Soria a partir de esta próxima madrugada, con temperaturas que pueden alcanzar hasta los -15 grados.

La UME ha dispuesto para ello numerosos vehículos todoterreno, palas y otros medios materiales como eslingas o cintas de gran resistencia dotadas de gancho para arrastrar cargas, según las mismas fuentes.

Por otra parte, en la capital el caos se ha multiplicado en las calles de la capital soriana con una capa de nieve de diez centímetros de espesor que ha obligado a suspender el transporte urbano e interurbano este viernes y el sábado.

En lugares con desnivel se observan coches atravesados y el Ayuntamiento ha pedido a los ciudadanos que eviten el uso de cualquier tipo de vehículo.

Los diez municipios con lluvias más copiosas

Una de las regiones más afectadas es Extremadura, con nueve de los diez municipios españoles con lluvias más copiosas hasta este mediodía, empezando por Alcuéscar (Cáceres) con 60 litros por metro cuadrado, y Serradilla (Cáceres) y Badajoz, ambas con más de 55.

La borrasca ha obligado a la Junta de Extremadura a activar de manera preventiva el Plan Especial de Protección Civil de Riesgo de Inundaciones para toda la región, mientras que el Ayuntamiento de Badajoz aplicaba su propio Plan Municipal de Emergencias tras el anegamiento de calles y rotondas, con la posibilidad abierta de desalojos voluntarios en barriadas próximas a los márgenes de varios arroyos y ríos: Gévora, Zapatón, Rivillas, Calamón y Guadiana.

En Cáceres, el embalse del Guadiloba mantiene abiertas todas sus compuertas laterales para aliviar el volumen de agua acumulada en las últimas horas, que había superado ya la cota de seguridad del 85 %, mientras que en Andalucía destacan los 49 litros por metro cuadrado de Sevilla y los 43 de Córdoba.

La lluvia también ha aumentado el caudal de otros ríos, como los de Bullaque y Estenilla de la cuenca del Guadiana en la provincia de Ciudad Real, y ha dejado impracticable algún acceso al castellanomanchego Parque Nacional de Cabañeros así como sus rutas, tanto en la zona de Ciudad Real -en Boquerón del Estena- como en la de Toledo -en El Chorro y en el Macizo del Rocigalgo-.

En Cuenca, el aumento del caudal del río Júcar a su paso por la ciudad ha pasado de 4 a 43 metros cúbicos por segundo, mientras que el embalse de La Toba se acerca al máximo de su capacidad.

La Comunidad Valenciana ha recibido algunos chubascos débiles en Chelva (Valencia) y Segorbe (Castellón) así como en las ciudades de Valencia y Alicante, donde no se registraban lluvias diurnas desde hace cuatro meses.

También Barcelona, con la vista puesta en las anunciadas restricciones por el nivel de los embalses, ha recibido hoy con esperanza la lluvia, aunque de momento en cantidades insuficientes para solventar el grave problema de sequía en Cataluña.

Tráfico interrumpido por nieve

La nieve está dificultando la circulación al obligar a usar cadenas para los turismos y prohibir el tránsito de camiones y autobuses en la A-1 en el puerto de Santo Tomé (Segovia), así como a cerrar tramos de carreteras de la red principal y secundaria de Castilla y León, con el tráfico interrumpido en la A-66 entre Guijuelo y Béjar (Salamanca) e incluso la A-2 cortada a la altura de Medinaceli (Soria).

Además de en Soria, otros puntos de la red viaria afectados se encuentran en Cantabria y La Ribera navarra, además de varias vías en las provincias de Burgos y Guadalajara.

El pronóstico de Aemet para las próximas horas indica alerta roja en Castilla y León, naranja en Aragón, Baleares, Cataluña y Comunidad Valenciana y amarilla en Andalucía, Asturias, Cantabria, Castilla-La Mancha, Galicia, Navarra, País Vasco, La Rioja y Melilla.

Sin embargo, las alertas ya no estarán relacionadas con la lluvia, sino con el frío y, en algunos puntos del litoral, con fenómenos costeros: esta misma noche habrá temperaturas gélidas de hasta 6 grados bajo cero en Castilla y León, Navarra, Aragón, Galicia y La Rioja; y el sábado pueden llegar a descender hasta los 14 grados bajo cero en el caso de la provincia de Soria y a los 10 bajo cero en la de Segovia.