La criatura vino al mundo en Donostia durante la primera quincena de agosto, pero casi podría decirse que, administrativamente, es un bebé que por el momento no existe. Su padre, en conversación con este periódico, admite cierto malestar por un compás de espera que se prolonga “durante casi un mes”. Su único objetivo es poder inscribir el nacimiento de su hijo ante la oficina del Registro Civil, en los juzgados de Donostia, algo que por el momento no ha sido posible

Una demora administrativa que no sale gratis para esta familia, puesto que de ese documento dependen otros trámites necesarios. “En la Seguridad Social fueron muy amables con nosotros, pero nos dijeron que sin ese certificado no pueden hacer nada”, explica el padre, que por el momento ha tenido que paralizar la tramitación de la baja laboral así como la solicitud de ayudas al Gobierno Vasco por nacimiento de hijo

No se trata de un caso puntual. Centros sanitarios consultados por este periódico reconocen que durante este verano viene siendo recurrente el malestar de familias “primerizas” que, quizá con la referencia del funcionamiento de otro tiempo, acuden a realizar el trámite de manera presencial y se tienen que dar media vuelta por donde han venido. “Solo funcionamos con cita previa. Fue la única respuesta que nos dieron, y hasta hoy”, dice el padre de un bebé que vino al mundo en Policlínica –con el que llegaron a personarse en el juzgado-, y que aguarda ahora cita para el próximo 15 de septiembre. 

Este periódico ha tratado de ponerse en contacto telefónico este miércoles con el Registro Civil a través de dos de los números disponibles, una comunicación que no ha sido posible a pesar de los reiterados intentos. Fuentes judiciales informan de que el sistema de cita previa, “como en otros estamentos de la administración”, se instauró con la pandemia, y ha venido para quedarse. “Están tardando muchísimo en dar las citas, no tiene nada que ver con el sistema de antes en el que cogías el número y aguardabas turno como si fuera la carnicería”, corrobora, de este modo tan gráfico, una letrada. 

Otra abogada consultada señala que a través de este sistema han desaparecido “las largas colas que, en ocasiones, llegaban hasta el exterior del juzgado”, una estampa de otra época en la que aguardan turno en una única fila tanto familias que venían a registrar el nacimiento de su hijo como quienes solicitaban certificados de defunción, y pensionistas. Actualmente solo las personas mayores de 65 años están exentas de solicitar la cita previa.

"Como si no tuviera papeles"

“El problema es que no nos han dado mayores explicaciones, y ahí nos hemos quedado. Casi un mes de espera para obtener un documento que, al parecer, es tan necesario para avanzar en todo lo demás. Sabemos que con el tiempo no va a haber mayores problemas, pero ahora mismo nuestro hijo es como si no tuviera papeles”, critica el padre de familia afectado.  

No podemos percibir el dinero de la baja, ni de la Seguridad Social ni de la empresa. Una vez que esté formalizado se hará el reembolso, pero estos días estamos en una especie de valle en el que nadie se hace responsable”, dice un tanto molesto. “Además nos sorprende que este trámite no se haya automatizado. Así como en la Seguridad Social se puede pedir cita online, en este caso tienes que ir sí o sí, y de momento nos hemos quedado un mes colgados, algo que les está pasando a otras familias”. 

Según recoge la página web del Departamento de Justicia del Gobierno Vasco, es posible realizar la inscripción desde el hospital en el que ha nacido el niño o niña, para lo cual es necesario aportar el DNI, NIE o pasaporte original de ambas personas progenitoras. También se requiere el Libro de Familia, certificado de matrimonio, o la declaración de paternidad-maternidad contenida en el formulario oficial para los casos en los que no ha habido enlace. “La posibilidad de inscribir a los niños o niñas desde el hospital está disponible en todos los centros públicos vascos de acuerdo a la ley”, recoge el mismo documento. 

Existe un plazo de 72 horas desde el nacimiento del niño o niña. “Desde luego que a nosotros esa opción no nos han dado. Es cierto que en el hospital te dan un documento que hay que llevar al juzgado. El médico certifica que el niño ha nacido, pero es en el juzgado donde se inscribe. De hecho, como curiosidad, el impreso que nos han dado en el hospital tiene una validez de un mes, y en nuestro caso vamos a estar rozando el palo. En caso de problemas nos lo habrían resuelto, pero desde luego que tanta demora no debería ser normal”, señala una de las familias afectadas. 

Según recoge el documento del Departamento de Justicia, en caso de no poder hacer el trámite desde el centro sanitario “hay diez días para inscribir el nacimiento ante la oficina del Registro Civil o Juzgado de Paz”. Un plazo que “puede ampliarse hasta los 30 días” siempre que se acredite justa causa. La atención al público en los Registros Civiles y Juzgados de Paz de Euskadi se realiza “por correo electrónico o por teléfono”. Por lo tanto, señalan las mismas fuentes, “si tienes que acudir de manera presencial a realizar un trámite a un Registro Civil es imprescindible que solicites cita a través del Servicio de Cita Previa de JustiziaEus”.