Las trabajadoras de las empresas subcontratadas que llevan a cabo las tareas de limpieza en Osakidetza encaran dos semanas más de huelga, del 20 de marzo al 2 de abril, convocada por LAB, UGT, CCOO y ESK, paro que ha llegado de la mano de diversas movilizaciones en la CAV.

Protesta de las trabajadoras de la limpieza realizada ayer a las puertas del Hospital Donostia.

ELA, por su parte, ha realizado un llamamiento para dar continuidad a las jornadas de paro, que comenzaron el pasado 27 de febrero y finalizarán el 3 de abril.

En algunos pasillos todavía hay suciedad con motivo de la huelga.

Fue precisamente esta fuerza sindical la que ayer denunció que el Gobierno Vasco diera orden el pasado viernes de efectuar una limpieza extraordinaria únicamente en el Hospital Donostia, hecho éste que se dio de forma excepcional en un contexto de huelga que afecta a los tres territorios de la CAV.

Desde ELA se denunció que Osakidetza y la empresa concesionaria Óptima han vulnerado “de forma sistemática” el derecho a la huelga de las trabajadoras, “haciendo su labor” mientras se hallaban en el ejercicio de este derecho.

Según ELA, la limpieza del Hospital Donostia se realizó respondiendo “a una decisión política”, medida que a su parecer en nada contribuye a resolver un conflicto que únicamente podrá desbloquearse en el momento en el que Osakidetza “decida abonar la carrera profesional a las trabajadoras de la limpieza”.

ELA advirtió de que en ningún caso el conflicto encontrará solución “mediante limpiezas extraordinarias, ni con el aumento de los servicios mínimos, ni con la presencia policial”. Sólo se zanjará, subrayó, cuando Osakidetza “decida abonar la carrera profesional a las trabajadoras de la limpieza”.

A su entender, el Gobierno Vasco “debería de asumir su responsabilidad e instar a Osakidetza para que se sienta a hablar con la parte social”.

Por su parte LAB, por boca del responsable de la Federación de Servicios Privados, Bittor González, además de calificar los servicios mínimos de “desorbitados”, criticó que “Osakidetza y las firmas adjudicatarias están rompiendo el ritmo de homologación que se ha llevado a cabo durante décadas” y recordó que la principal reivindicación del colectivo en huelga no es otro que conseguir que sus condiciones laborales se homologuen a las del personal que trabaja de forma directa para Osakidetza.

La demanda de equiparación se centra en cuestiones vinculadas a la homologación que no son las salariales y que pasan por igualar, entre otras, las condiciones en materia de contrato relevo o permisos.

Diálogo abierto

Por su parte, la consejera de Salud del Gobierno Vasco, Gotzone Sagardui, instó a las empresas y trabajadoras a que avancen por la vía de alcanzar un acuerdo que ponga fin a la huelga, algo que confía que ocurra “lo antes posible”.

“Esperamos que empresas y trabajadoras puedan alcanzar un acuerdo lo antes posible porque, indudablemente, es un servicio muy importante para nuestras instalaciones, que se ven afectadas por conflictos como este”, añadió la consejera de Salud, que concluyó asegurando que “la vía de diálogo la tienen abierta” y que corresponde a las partes afectadas, empresas y trabajadoras, “llegar a un acuerdo”.